PULSO POLITICO. La oposición política mexicana, anda de cabeza

Gabriel Sánchez Andraca

Los partidos de oposición, PRI, PAN, PRD, que empezaron formando la alianza Va por México, pese a sus enormes diferencias ideológicas y que ha derivado en el Frente Amplio por México, al incluir a “la sociedad civil”, con la inclusión de organismos empresariales y agrupaciones de diferente tipo, encabezadas por Vicente Fox, andan hechos bolas.

Ya se le desbarató el organismo que se iba a encargar de designar, siguiendo ciertas reglas, al candidato a la presidencia de la república, pues los organismos ciudadanos dijeron que los dirigentes de los partidos se han apoderado del control de dicho organismo y además, varios de los aspirantes a figurar como  candidatos, ya dijeron que mejor no.

Solo quedan doña Beatriz Paredes Rangel, del PRI, doña Xochitl Gálvez, del PAN; don Santiago Creel también del PAN y algún otro.

Quien salga electo candidato de ese “Frente Amplio…” será el candidato que deberán apoyar los tres partidos de la Alianza, más los grupos empresariales y ciudadanos que integran el Frente.

PARA MORENA, ESTO CONSTITUYE UN FRACASO del real dirigente opositor, el empresario Claudio X González, que coordina a los tres partidos base de la ampulosa organización opositora.

Beatriz Paredes, la experimentada política priista no tiene posibilidades de ganar la candidatura, pues la agrupación dirigida por el señor X, necesita un candidato de la derecha más recalcitrante, que responda a los intereses de quienes están moviendo a la oposición y doña Beatriz ha sido liberal siempre.

Muchos aseguran que la más viable es doña Xochitl, que ha destacado por sus poses medio estrafalarias como diputada y como senadora, pero también hay quienes consideran a Santiago Creel, presidente de la Cámara de diputados, como el más congruente y serio de los panistas de ahora.

Mientras tanto el Consejo para seleccionar al candidato o candidata opositor a Morena, integrado por personas de renombre entre periodistas, académicos e intelectuales prestigiados, todos conservadores o medio-conservadores, ya se desintegró, pues don Claudio no logró acuerdos con los dirigentes políticos que se le salieron de control.

Algunos columnistas de la prensa de la ciudad de México, consideran que ante este fracaso, el empresario metido a dirigente de los partidos de oposición, los grupos derechistas estadounidenses, a la mejor suspenden sus aportaciones económicas para financiar a la derecha mexicana. Eso desinflaría a la oposición, que de todos modos no tiene posibilidades de triunfo.

EL GOBERNADOR DE PUEBLA SERGIO SALOMÓN Céspedes, entregó cinco nuevas patrullas al municipio de Tepeaca y presumió la entrega de cinco mil vehículos para reforzar a las policías municipales del Estado. Eso está0 bien, pero constituye solo una parte de lo que debe hacerse para mejorar la seguridad.

Son importantes los elementos técnicos, los vehículos, el armamento, etc., pero lo básico, lo realmente importante, es el elemento humano.

Los policías no solo deben estar bien pagados y contar con todas las prestaciones de ley, sino estar bien preparados, capacitados en lo que constituye su oficio de vigilantes para mantener la paz y la tranquilidad entre los habitantes de un municipio, sino también saber respetar los derechos humanos, algo que no ocurre con frecuencia por los abusos de presidentes municipales o regidores que les dan órdenes y que se ven obligados a cumplirlas o son destituidos sin consideración de ninguna clase.

Ayer informamos de los abusos cometidos por la ex presidenta de la capital del Estado, Claudia Rivera, que ahora está en líos con la justicia y también la presidenta municipal de Izúcar de Matamoros, por los abusos de 18 policías que el 10 de marzo de este año, se ensañaron contra dos periodistas locales y cinco mujeres activistas de organismos femeniles, sin ningún motivo, solo sospechando de actividades contra las autoridades.

De nada sirven los mejores equipos policiacos, si los elementos que conforman los cuerpos de seguridad, van a seguir siendo abusivos, represores y violadores de los derechos humanos. Eso desprestigia a las autoridades surgidas de Morena, que siguen pensando en el pasado reciente.