LALO RIVERA en el brindis de honén es poesíaor durante su exposición de arte Porque la pintura también es poesía, el pasado miércoles 31 de enero en el Foro Boca, donde dieciséis poetas le dieron vida a sus obras, aquí posa con Armando Junior Huerta Collado, Gonzalo Valenzuela, Mirtha Castellanos Zequera, Angie Siadous y Alejandra Garizurieta Arango.
TEXTO DE SALA
Así es como hoy, los poetas nos fusionamos a nuestro particular estilo de observar las destacadas obras de Lalo Rivera, y nos sumergimos entre tintas de emociones, trazos que fluyen, rostros, figuras, colores, formas que dan vida y libertad para poder plasmar en cada verso una historia enmarcada con cada pintura. Creando el lazo perfecto que permite a la mente creativa de los poetas desarrollar un poema como homenaje al gran hombre que viaja entre sus pinturas, hermanando con la belleza de la palabra escrita. Y a su vez, va construyendo un gran legado para las nuevas generaciones, donde queda tangible que el arte y la poesía es para el bien de la humanidad. Gracias Lalo Rivera por la invitación a este gran viaje colectivo entre la magia de la pintura y el hechizo de las metáforas. Que nos enseñan a escuchar y observar la belleza del alma en las obras artísticas y en la escritura. Dejando que nos maravillemos del poder de los sentidos que nos conmueven y nos llevan a sentir, intensas emociones que nos hacen cuestionarnos.
Mirtha Castellanos Zequera
Escritora y Poeta
Presidente ANIP Sede Conurbada
Veracruz ~ Boca del Río
TITULO: Mis Manos
AUTOR: LALO RIVERA
TÉCNICA: Acrílico S/papel fabriano
MEDIDAS: 50 X 70 cm.
AÑO: 2024
CONTACTO: 229 125 3092
Por Angie Siadous
MIS MANOS
Mis manos aprendieron a danzar el vals del amor de papel.
Ellas eternizan al fantasma entre mis sábanas.
Ellas acarician mi cuerpo desnudo sediento de pasión.
Mis manos, dibujan en el aire cuando bailo al compás de una canción.
Ellas me abrazan y me levantan, ellas me alimentan y calman mi sed.
Mis manos dejan huella con mis poemas, sólo ellas entienden mi poder,
sin ellas yo sería una lámpara sin luz, una vasija sin agua,
un corazón sin vida y un beso sin pasión.
Mis manos recogen el rocío de la mañana,
me cubren con una manta cuando el frio amenaza,
ellas son el sello de mi esencia cuando escribiendo borran todas mis tristezas.
Con ella he creado puentes de amor, mecido tres cunas, secado lágrimas ajenas,
he recogido flores,
y juntas hemos sufrido el veneno de las espinas de los traidores. Cada sensación las he vivido con ellas,
han tapado mi boca para que el silencio grite sus locuras.
Ellas han pintado de colores mis consuelos, sueños y aventuras.
Gracias a mis manos he dejado huella,
la historia hecha poema, de verso en verso
han tejido mis palabras para dejar plasmados mis recuerdos.
Nadie más que ellas conocen todos mis bemoles,
y cuando llegue aquel día,
en que la tierra me cubra con más tierra,
y mi alma trascienda,
serán ellas las que, sobre mi pecho,
cubrirán este corazón para entonces ya muerto,
y entre sus dedos dormirá la rosa
que perfumará el sendero hacia mi descanso eterno.
Angie Siadous