Mayo se pinta de rojo en Puebla

Victor de regil

 

Mayo se convirtió en un verdadero baño de sangre para nuestro Estado, la violencia ha alcanzado cifras históricas, todo ello provocado principalmente por la ineficiencia de las autoridades municipales, que son el primer contacto que tiene la ciudadanía para recibir la protección del Estado.

Y es que, lamentablemente. Mayo ha sido el mes más violento en Puebla en lo que va del año, pues reporta el mayor número de delitos y sobre todo el que más homicidios contabiliza: fueron 128 muertes violentas durante los 31 días; lo anterior quiere decir que cada día mataron a cuatro personas dentro del territorio poblano, y más de la mitad de las víctimas fueron asesinadas con algún tipo de arma.

Las cifras no son distintas a las que se dieron el mes pasado, pues la diferencia fue mínima con la cifra que registró febrero, la cual ahora se convirtió en el segundo mes con el número de asesinatos más alto pues contabilizó 127 asesinatos, es decir, un caso menos que mayo del presente año, seguido de abril que ocurrieron 125 homicidios, son cifras de verdadero terror nunca antes vistan en Puebla.

Lo que respecta a los homicidios dolosos perpetrados en mayo, 59 de ellos se cometieron con alguna arma de fuego, nueve con arma blanca y 21 con otro tipo de elemento. En tanto que los homicidios culposos, fueron 38 de ellos ocasionados por accidente de tránsito y uno más que no fue especificado.

En lo que refiere al número de denuncias realizadas también se registró un aumento durante el mes de referencia, al registrarse 695 carpetas de investigación, mientras que en el mes de abril fueron 602.

Los números de la Fiscalía General del Estado son alarmantes, pues refieren que fueron siete mil 217 delitos los cometidos durante mayo, la incidencia delictiva en todo el estado aumentó en un 14 por ciento en comparación con abril y cada día se cometieron 232 hechos delictivos, casi 10 cada hora.

Durante el mes de mayo fueron 888 hechos delictivos más que abril y uno de los delitos que repuntó fue el de homicidio al registrarse 128 casos, tres más que los que se registraron durante el mes previo.

La tendencia al alza en lo que va del 2022 es preocupante y sigue en ascenso. Recordemos que en enero se registraron 86 homicidios, con una incidencia delictiva de 5 mil 897; febrero fue de 127 asesinatos y una incidencia de 5 mil 964; marzo, por su parte, tuvo 122 asesinatos y una incidencia de 7 mil 134; abril creció a 125 asesinatos, con una incidencia de 6 mil 329 y, finalmente, el mes de mayo, como hemos comentado con 128 asesinatos, 4 de ellos al día y una incidencia delictiva de 7 mil 217.

Lo anterior, no da un escalofriante acumulado de los meses de enero a mayo de 2022 de 588 personas que han sido asesinadas en territorio poblano en lo que va del año. Esto quiere decir que de continuar con esta misma tendencia en lo que resta del año, Puebla podría estar alcanzando los casi mil 500 asesinatos en un año, una cifra récord nunca antes vista, lo que nos muestra la gravedad del asunto y el tamaño del problema que las autoridades de todos los órdenes de gobierno deben de resolver.

Entre los hechos violentos de este mes destaca el feminicidio de Cecilia Monzón Pérez el cual, según las investigaciones realizadas hasta el momento, fue planeado por el ex candidato al gobierno de Puebla Javier López Zavala, pues este sujeto le ordenó a su sobrino y a un sicario que la emboscaran y la asesinaran de al menos seis disparos, mientras que la camioneta en la que escaparon, presumiblemente, pertenece a Santiago Barcena, quien fuera se secretario particular en su paso por el marinismo. Como sabemos, los hechos ocurrieron el 21 de mayo en Camino Real a Momoxpan y Periférico.

Otro hecho que conmocionó a los poblanos en mayo fue el hallazgo del cadáver de Sandra Elizabeth Pérez Portillo, pues después de permanecer un mes secuestrada, su cuerpo fue encontrado al fondo de una cisterna el 27 de mayo en San Mateo Mendizábal, perteneciente a Amozoc, pues las personas que la privaron de la vida la arrojaron a este depósito de agua ubicado en una casa que rentaron exclusivamente para tener cautiva a la madre de 32 años.