PUERTO MORELOS, QUINTANA ROO.- Es muy difícil de entender la gran cantidad de consideraciones que ha tenido a lo largo del tiempo, Andrés Manuel López Obrador (primero como activista, luego como candidato y hoy como presidente) con relación a Manuel Bartlett Díaz, un personaje de la política nacional, pero de esa que quisiéramos desterrar del sistema.
No hace falta enlistar en todo lo que ha participado Bartlett, desde el fraude de 1988, hasta las amenazas que mandó por vía de José Antonio Zorrilla a Julio Scherer y Vicente Leñero, desde la sospecha por el asesinato de Manuel Buendía hasta la sospecha por el asesinato de Carlos Loret de Mola Mediz. Este personaje de la rancia política mexicana que estuvo del lado de lo peor del viejo sistema priísta, fue rescatado por López Obrador cuando como senador del PRI, decidió que defendería la soberanía energética nacional.
Desde entonces se le cuestionó a López Obrador el que lo integrara a su movimiento, pero eso no paró ahí, llegó al punto de nombrarlo director de la Comisión Federal de Electricidad.
Pero, ¿qué ha hecho Bartlett en beneficio de la industria eléctrica nacional?, absolutamente nada. Durante la pandemia se cortaron miles de servicios por falta de pago, aún cuando la parálisis económica y el desempleo se elevaron de forma drástica. No ha hecho nada por mediar o proponer una solución para el conflicto del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) tras la extinción de Luz y Fuerza del Centro, peor aún, ahora es acusado junto con su administración por ser co responsable de las inundaciones en Tabasco, incluso el propio gobernador de la entidad lo señala.
Aún así, el presidente López Obrador lo mantiene protegido.
También su familia ha pasado por las filas de la sospechas de corrupción, su hijo con una empresa sancionada que vendió a sobreprecio respiradores al gobierno, sus sobrinos en Venezuela que fueron la causa de la amenaza a Scherer y Leñero, toda una historia llena de oscuridad que pareciera, ser premiada por el presidente en turno.
Manuel Bartlett Díaz sintetiza lo peor de la clase política mexicana, sus desplantes, su soberbia, su impunidad son la antítesis del discurso de la 4T, pero ahí sigue, campante y muy bien resguardado por el presidente López Obrador.
¿Qué le debe?, ¿qué hay detrás de todas esas consideraciones?.