La gubernatura lista, sigue la alcaldía.

 

Alejandro Armenta será quien encabece la coordinación estatal de los comités de defensa de la 4T, una vez resuelto esto, el siguiente tema que sigue de importancia a resolver es ¿quién será el o la candidata al gobierno de la capital del Estado? Evidentemente no se trata de un tema menor, pues no solo se trata de la cuarta ciudad más importante del país sino que, además, puede construirse desde ahí una candidatura a la gubernatura para 2030.

A diferencia de la candidatura al gobierno del Estado donde había dos figuras sumamente competitivas como lo era Alejandro y Nacho Mier, en la capital no tienen una figura que destaque de igual manera.

En este momento, no sabemos de algún aspirante de Morena que encabece las encuestas. Ni hombre ni mujer que se haya medido, destaca de una manera que sea inalcanzable.

No hay con claridad, incluso, en cómo será el proceso de selección, si será a través de otra encuesta, si intervendrá el qué será el candidato a gobernador, o el propio gobernador o si será una decisión que se tome desde la ciudad de México o, como también puede ser, desde el mismo Palacio Nacional.

Los partidos aliados de Morena, PT y el Partido Verde asegura, según ellos, que esa posición les corresponde pero, ¿de verdad Morena cederá la capital del Estado a cualquiera de los partidos mencionados cuando apenas si alcanzan el 3 por ciento de la votación y sus registros, incluso, estarán en riesgo? La verdad es que no. De obtenerla, sería una generosa concesión que no alcanza a verse de ninguna manera.

La decisión que deben tomar es de vital importancia, pues no podemos olvidar que el 34 por ciento de la votación de toda la entidad se encuentra en la capital y la zona conurbada. En pocas apalabras, si no se gana la capital y su zona metropolitana, pueden perder la elección a la gubernatura del Estado, de ese tamaño es la importancia.

Pepe Chedraui figura como la opción que se impulsa desde Casa Aguayo, aunque difícilmente los conocidos como morenistas “puros”, otorguen ese espacio a alguien que no lo bajan de “oportunista”.

Son muchos los que han levantado la mano, pero, en la realidad son pocos los que destacan. En lo que respecta a hombres, podemos mencionar al propio Pepe Chedraui, Alejandro Carbajal y, como cuota del Partido Verde, a Toni Gali Jr.

Lo que respecta a las mujeres, sin duda destacan la ex alcaldesa Claudia Rivera (a pesar de tener negativos sumamente altos); Olivia Salomón quien podría tomar esta posición como premio de consolación por su participación a la gubernatura y una tercera a quien, por cierto, no podemos dejar atrás por su alto crecimiento en las encuestas en los últimos meses, es a María Luisa Conde quien, además de su fuerte posicionamiento e imagen fresca, es cercana al propio Alejandro Armenta y a Nacho Mier.

Recordemos que, a diferencia de lo que sucedió con el tema del género en las gubernaturas, en las presidencias municipales aún no está esa obligatoriedad, por lo que Morena tendrá la libertad de escoger a su mejor hombre o su mejor mujer para esta importantísima posición.

Quien quede como candidato de lo antes mencionados, tendrá que enfrentarse, casi es un hecho, a Mario Riestra, quien presenta los mejores números de la oposición la cual, encabeza las preferencias en la mayoría de las posiciones por al menos 3 puntos sobre el partido y la coalición oficialista, por lo que tendrán que tomar buenas decisiones.

Hay que recordar que desde 2019 en la elección extraordinaria y luego en la intermedia de 2021, quedó claro que la capital y la zona conurbada son territorio adverso para el morenismo. De ahí que sea tan necesario sea un perfil distinto.

Uno que no sea enteramente lopezobradorista de cepa. Se busca competitividad. Unidad.

Un personaje, hombre o mujer, que pueda darle la batalla a la derecha e incluso arrebatarle votos al PAN y al que se perfila como el candidato del Frente Amplio por México, Mario Riestra.