Para nadie es un secreto la cercanía que la ex presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera, mantiene con organizaciones de vendedores ambulantes a los que, durante su trienio, consintió de manera histórica y que convirtieron al Centro Histórico de Puebla en un verdadero mercado mientras ella fue la alcaldesa.
Y es que, con la evidente intención de generar una mala imagen en el Centro Histórico de Puebla y afectar los esfuerzos del alcalde Eduardo Rivera, un puñado de comerciantes ambulantes ha realizado diversos amagos de instalarse en las principales calles, con más estruendo que verdadera intención de regresar a sus ventas. Lo que es una realidad es que se trata solamente una provocación en la que, con torpe descuido, ha dejado sus huellas el equipo de la ex presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco.
Sin embargo, hasta el momento no ha habido más que un ajetreo breve, focalizado y sin mayores efectos.
Recordemos que la semana pasada, durante varios días, los ambulantes que están identificados con los impresentables René Sánchez Galindo y Andrés García Viveros, ex funcionarios de la peor presidenta municipal que ha tenido Puebla, han ido a hacer su bien planeado acto de provocación al gobierno de Eduardo Rivera Pérez, cuyo mayor mérito hasta el momento ha sido precisamente ese: limpiar de informales el primer cuadro de la ciudad, ése, el mismo que Claudia Rivera dejó hecho un asco.
La estrategia de los personeros de la morenista es muy evidente Los ambulantes acuden unos minutos, no más de una hora, y aparentemente buscar instalarse. Llevan algunas mercancías. Obligan a la policía municipal a actuar. Se genera un muy focalizado ajetreo, que no llega realmente a enfrentamiento. Van muchas mujeres, su situación de vulnerabilidad, por el género, inhibe y complica la actuación de los agentes de la Policía Municipal. Pero hasta ahora no ha habido realmente un operativo de ambulantes, masivo y organizado, por “recuperar” las calles. Algunos reporteros y medios han caído en el montaje.
Es importante mencionar también que no han participado las organizaciones beligerantes y numerosas, aunque sí se han detectado a algunos ambulantes identificados con Antorcha Campesina entremezclados con aquellos bajo la influencia de los operadores políticos de Claudia Rivera.
En esos días de amagues, el objetivo de estos ambulantes no fue realmente instalarse, sino causar desorden en torno a la camioneta que decomisó mercancías. Fue entre las calles 6 a la 10 Poniente.
Rodearon el vehículo oficial y no lo dejaban salir. Eso se puede observar claramente en los videos que circulan en las redes sociales.
También, muchos lograron identificar, gracias a las evidencias audiovisuales, vehículos de la gente de Claudia Rivera, lo que nos lleva a concluir que todas estas acciones no son más que una simulación. Pretenden generar problemas, sólo eso. Mala imagen. Golpear al gobierno de Rivera Pérez pero, no lo han logrado.
El Centro Histórico sigue limpio y libre de ambulantaje, como hace muchos años atrás no se había visto.
Detrás de todo, nos informan quienes saben, están el ex titular de Gobernación Municipal, René Sánchez Galindo. También Andrés García Viveros, el funcionario multiacusado de multiacosador. Manos derechas del vivanquismo. Ejecutores del resentimiento del grupo político de Claudia Rivera Vivanco que, por muy increíble que parezca y después del desastre de gobierno que presentaron, pretender regresar a gobernar esta ciudad para el 2024.
La búsqueda, por cierto sin éxito, de desestabilización de la ciudad es la divisa con que busca recuperar terreno de operación.
Meterle ruido al actual ayuntamiento. Armarle pleito con las autoridades estatales. Son sus verdaderos y oscuros objetivos. Es una campaña negra. Misma que, por cierto, pronto tendrá puntual respuesta.