P U L S O P O L I T I C O
Gabriel Sánchez Andraca
La delegación Puebla del Sindicato de Telefonistas, se ha pronunciado por mayoría, en contra de la reelección de Francisco Hernández Juárez, como dirigente nacional de la mencionada organización, pues lleva ya 44 años en dicho cargo y vela más por los asuntos de la empresa que por los intereses de los trabajadores, afirma Marco Antonio Mazacle Rojas, ex dirigente de los telefonistas en Puebla.
Informó que una mayoría de los miembros del sindicato, se ha pronunciado por un cambio y que los que no lo han hecho, ha sido por temor a represalias del actual dirigente nacional.
Hernández Juárez, fue un líder carismático y popular. Cuando andaba rondando los 30 años de edad, decidió acabar con el caciquismo sindical de la organización que agrupa a los telefonistas mexicanos y que ya no aguantaban más violaciones a sus derechos. Nacionalmente fue uno de los dirigentes sindicales, más reconocidos por sus ideales de apertura y democracia sindical.
Se engolosinó con el poder y ahora, a sus 71 años de edad y con 44 de estar al frente del sindicato de telefonistas, pretende una nueva reelección, pero las cualidades que tuvo, ya se extinguieron. Los trabajadores lo acusan de ser apatronado y descuidar por completo los intereses de los trabajadores y demandan su salida.
Consideran que el problema más grave al que se enfrentará la nueva dirigencia, porque están seguros de que Hernández Juárez no podrá reelegirse, será el de las prestaciones para los 29 mil trabajadores sindicalizados y de los 30 mil jubilados. Temen que por la pandemia del Covid-19, la empresa ponga pretextos para no cumplir con sus obligaciones laborales.
EL GOBERNADOR MIGUEL Barbosa Huerta, en su conferencia virtual de ayer, informó que las clases presenciales en el sistema educativo poblano, se reanudarán, hasta que el semáforo sanitario esté en verde y para eso no hay fecha precisa, pues dependerá de que siga manteniéndose la disciplina sanitaria o de que se tenga la vacuna para prevenir el mal o se encuentre un tratamiento específico contra el virus.
En la misma conferencia las autoridades de Salud del Estado, informaron que se han tomado 47 mil 241 muestras, se han registrado casi 30 mil casos positivos; hay 591 hospitalizados, 141 con ventilación asistida y en total ha habido 3 mil 799 defunciones, 17 en las últimas 72 horas.
La mayor parte de los casos se han registrado en la zona connurbada. Suman el 72 por ciento del total. Hay municipios donde no se han presentado contagios y otros que han tenido pocos.
Recomendó el gobernador a la autoridades municipales, que no dejen de realizar la ceremonia del “grito”, pues esa ceremonia es una de nuestras tradiciones más importantes, pero que lo hagan guardando las recomendaciones de las autoridades sanitarias para evitar contagios del coronavirus y que recomienden a los ciudadanos de sus municipios, no llevar a dicho acto a niños, ni a personas de la tercera edad.
POR OTRA PARTE, El gobernador informó que el nuevo emplacamiento de vehículos, quedará suspendido por un tiempo, pues no considera apropiado que en la condición de crisis económica derivada de la sanitaria, que padecemos, se cargue a las familias con este gasto.
Que bueno que se tomó esta medida, pues había rumores que no eran favorables a las autoridades, precisamente porque los ciudadanos consideraban una desconsideración para todos, cargar el gasto del emplacamiento en momentos tan difíciles.
También informó el mandatario, la venta de los cuatro helicópteros propiedad del gobierno del Estado, mismos que fueron adquiridos en los tiempos del morenovallismo. Uno de ellos, el más moderno, era utilizado para transportar al gobernador a la ciudad de México y a algunas giras por el interior del estado, que fueron muy pocas. Además, el señor Moreno Valle Rosas, cuando decidía despachar desde sus oficinas del Centro Integral de Servicios, que se encuentra en la zona Angelópolis de esta capital, se trasladaba de Casa Puebla a ese sitio, en helicóptero.
Ahora los cuatro aparatos están sin usarse, pues ello requeriría un enorme gasto de mantenimiento que el actual gobierno ha decidido ahorrarse.