¿Prohibir comida chatarra en Puebla?

 

Victor de Regil

 

Las bancadas de Morena, Partido del Trabajo, Encuentro Social y Partido Verde, quienes juntos logran la mayoría que se requiere para esta reforma, en el Congreso del Estado promoverán reformas para prohibir la distribución, venta y suministro de comida chatarra a menores de edad en Puebla, como ocurrió en el vecino Estado de Oaxaca. Dicha propuesta no tendrá problema alguno en ser aprobada.

Gabriel Biestro Medinilla informó que a nivel nacional los coordinadores del partido acordaron replicar la iniciativa en todos los estados del país, pero en el caso de Puebla sumarán a los partidos aliados.

Recordemos que el pasado 5 de agosto, Oaxaca se convirtió en el primer estado del país en prohibir la distribución, venta, regalo y suministro de bebidas azucaradas y alimentos chatarra a menores de edad, una vez que el Congreso local reformó la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en esta materia.

Es importante mencionar que en la Ley de Educación del Estado ya existe la prohibición de distribución y comercialización de comida chatarra dentro de las escuelas, siendo lo que se busca en la propuesta que se prepara es que dicha prohibición sea en cualquier establecimiento dentro de Puebla, para alejar estos alimentos que son considerados como dañinos para la población infantil.

Esta medida ha detonado un debate en los medios de comunicación y redes sociales. Este debate pasa por dos grandes posturas: Para los defensores de la prohibición, se trata de un acto de vanguardia en defensa de la salud pública de los niños y adolescentes. Para sus críticos, se trata de una acción incorrecta que no tendrá ningún efecto sobre los patrones de consumo de la población, además de tratarse de una intromisión del Estado en las libertades de decisión en la vida de los individuos.

Pero aquí es donde surgen las preguntas ¿Cuál es el problema de las prohibiciones? Uno de ellos son sus costos. Se requiere gastar para hacerlas cumplir. Se requiere de un aparato de inspección para obligar a los ciudadanos a cumplir con la norma. En algunos casos, esto puede llevar a usar el brazo coercitivo del Estado. Por otra parte, las prohibiciones tienden a generar mercados negros y estos pueden producir corrupción, ilegalidad y violencia. A esto, hay que añadirle costos intangibles, restricción de libertades individuales, perdida de respeto a la ley ante el incumplimiento masivo, etc.

Recordemos que si el Estado prohíbe algo, total o parcialmente, como lo marca la experiencia, tiede a reducir la disponibilidad de ese bien o servicio dentro del mercado legalmente establecido. Eso le impone un costo al consumidor ya sea directo, por la vía del precio, o indirecto, por la vía de la comodidad del acceso.

Lo anterior, disminuye el consumo del bien o servicio prohibido o restringido. Contrario a la opinión de algunos, la prohibición del alcohol en Estados Unidos es un buen ejemplo de este efecto: el número de muertes por cirrosis hepática disminuyó en una tercera parte entre los años 1919 y 1933, tiempo de la prohibición.

Con lo anterior, y toman do en cuenta las medidas que se quieren aplicar en Puebla, emulando el caso oaxaqueño, la pregunta sería ¿es buena o mala idea prohibir la venta de comida chatarra a menores de edad? Es difícil conocer la respuesta. Sin embargo, lo que es cierto es que la decisión que se vaya a tomar en el Congreso del Estado, debe ser desde la evidencia empírica y no desde el prejuicio ideológico o político.