OASIS. Hasta siempre

Gonzalo Valenzuela Ramírez

 

Ahora que estoy a punto de jubilarme barajeo proyectos futuros para aprovechar la experiencia y el tiempo que tendré en mis manos; no sé si será mucho o poco, lo que sí sé es que podré realizar aquello que aplacé una y otra vez por falta de tiempo.

 

Ya no habrá excusas y aún siguen vivas ilusiones y el deseo de resarcir el tiempo que sacrifiqué a la familia; gracias Irene, sin tu apoyo no habría sido posible, la vida no termina con el retiro, la vida sigue y seguirá su curso, conmigo o sin mí, espero saber aprovechar sabiamente el tiempo que Dios me permita.

 

Ya no estaré esclavizado a un horario, se abre un mundo de posibilidades, ahora seré el dueño absoluto de mi tiempo, tal vez sea el momento de viajar, o de caminar descalzo por la playa a cualquier hora, de publicar los versos olvidados en mis libretas.

 

Aprovecharé el tiempo; la vida es tan fugaz…, cuando miro al pasado y observo todo aquello que se te fue de mis manos por temor a fallar, por el qué dirán, por inexperiencia, porque no hubo quien me orientara correctamente o me animara a desafiar mi suerte.

 

Jubilación viene de júbilo. Misión cumplida, cierro un ciclo y se abre otro. Me lleno de alegría, porque llegó la hora de administrar como yo quiera mi propio tiempo, mi posesión más valiosa, ya sembré trabajo, servicio y dedicación, es tiempo de cosechar.

 

 

 

Gonzalo Valenzuela recibe Reconocimiento de sus compañeras y compañeros de la USAER 50, de manos de la Lic. Luz de Abril Gastaldi Almeida, que a la letra dice: A un gran amigo y maestro, gracias por acompañarnos en esta gran aventura que es enseñar y amar. Te recordaremos por estos años de servicio, te hemos aprendido mucho. Con cariño y admiración… tu equipo de la USAER 50

 

Jueves 21 de Septiembre 2023

Bienvenida jubilación, abriré la puerta a lo desconocido, me dejaré seducir por el misterio. El retiro es un punto de salida, no de llegada, la jubilación es el cambio de estafeta de mis viejos sueños a mis nuevas esperanzas. Aún sigue encendida la flama de la fe y va tomada de la mano del amor y el servicio.

Les dejo con el poema que escribí para mis amigas y amigos de la USAER 50, a los que no me atrevo a decir adiós, sino…

HASTA SIEMPRE

/Cuando los amigos se van/ /en tu corazón se quedan…/ /Sus almas conectadas/ /permanecerán serenas. / Cuando los amigos se van/ /no hay tiempo y distancia/ /que los pueda separar/ /el amor; los une y acerca. / /Recuerdos resguardo en mi corazón/ /de todo lo bello vivido/ /vivencias inolvidables protejo/ /del comején del olvido. /

/Así que no les voy a decir: adiós/ /el Tren de mi Vida sigue su marcha/ /y en un vagón especial me acompañan/ /será mejor decirles: – ¡Hasta siempre! / / ¡Hasta siempre! Sí, será mejor/ /gracias por enseñarme a confiar/ /gracias por enseñarme a soñar…/ /La amistad, es la más bella flor/ /que se puede cultivar/ /en tiempos de alegría y dolor. / / ¡Hasta siempre! /

                                                                                                                                                          Gonzalo Valenzuela

 

Gracias amigas y amigos de la USAER 50; Lucio, Karen, Ascenez, Abril, Cici, Sarahí, Toñito, Olivia, Susy Almeida, Susy Burgos, a mi querida esposa Irene y a mis hijos; Adrián y Tonatiuh. Gracias a los que ya no salieron en la foto: Marce, Jaime, Miguel, Anita, Silvia Vallejo, Naty, y a nuestra supervisora, Luz Ma.