Gustavo Monterrubio Alfaro
¿Cuál será la política migratoria que aplicará Trump? En virtud que es un tipo inestable y voluble mentalmente no se sabe con certeza, sin embargo, se han filtrado estrategias generales de las que se pueden extraer algunas hipótesis.
El próximo “zar de la frontera”, Tom Homan, ha ido de más a menos, zigzagueando, desde todos los ilegales serán deportados, pasando por los criminales y con orden de deportación, hasta quién sabe quien. Incluso ha propuesto el uso del ejército y sus instalaciones para agilizar y asegurar que el programa de deportaciones funcione.
Elon Musk, el hombre más rico del mundo y que en breve sumará otro título: el hombre más poderoso en la aldea global, si no es frenado o eliminado en el intento, propuso, a contrario sensu, que se abran las fronteras al ingreso de mano de obra cualificada, obviamente, la que demanda el poderoso sector tecnológico, y Trump de inmediato le apoyó, lo que le costó la decepción y el repudio de votantes, donantes y simpatizantes, en fin, después del proceso electoral, todo político es simplemente político.
Con la bruma de las deportaciones masivas como telón de fondo, repetirá la estrategia de deportar a líderes pandilleros, como hizo con las Mara Salvatrucha: MS13 y Barrio 18. Estos fueron repatriados a el Salvador, allí se reprodujeron como setas y se expandieron como la peste hacia los países limítrofes, Guatemala y Honduras, pasando por México, para retornar a Estados Unidos, como una trasnacional del crimen.
No lograron reproducirse en Nicaragua, porque en este país se aplicó una estrategia pronta y expedita para evitar que el cáncer naciera: Mara que atrapaban tratando de organizar una clica, fuera nica, salvadoreño o de otra nacionalidad, en el acto lo ejecutaban, claro que el gobierno negará esto, pero así fue. De alguna manera Nicaragua se convirtió en el tapón que protegió a Costa Rica y Panamá.
En el Salvador, como es sabido, Nayib Bukele, aplicó una masiva, agresiva y frontal, pero eficaz operación para detener el avance de las maras y desarticularlas, ¡y lo logró! Asistido y financiado por China -la estrategia es típicamente oriental-, ha logrado bajar los índices de criminalidad, y el accionar de las pandillas está en niveles bajos, tal vez, quedan reductos de lo que fueran las dueñas de la calle, de la vida, del patrimonio ajeno, del destino de jóvenes y controlaron bastos territorios del Pulgarcito de América.
Quien esté esperando deportaciones marabunta, se quedará esperando, porque no serán mayores que las que llevaron a cabo Obama y Biden, que superaron las cifras de deportados de la primera administración Trump, y prometió lo mismo en aquella campaña: deportar a todos los ilegales porque eran criminales, violadores y narcotraficantes, también construir el muro en toda la frontera, ¿ya lo olvidaron?.
¿Creen que Elon Musk esté de acuerdo en expulsar a los trabajadores esenciales?, sólo un idiota se daría un balazo en el pie. ¿Echar a los que trabajan en el field, que siembran y cosechan lo que se sirve en la mesa de los blancos? ¿Repatriar a los que asean sus casas, cuidan sus jardines, limpian sus albercas y letrinas, les sirven la comida y tortillas hechas a mano, cuidan a sus niños y lavan lo que ensucian? ¿Excluir a los que construyen sus casas, recogen basura, sirven en restaurantes, comercios, unidades hospitalarias y hoteles? ¿Joder a los que pagan impuestos y no reciben contraprestaciones por temor a ser deportados? ¿Expulsar la mano de obra ilegal cuasi esclava, barata, calificada y eficiente? ¡Sí todo ello abona a la eficiencia gubernamental!
Lo que México debe evitar a toda costa es que sea el receptor de todos los deportados, de todas las nacionalidades y estatus migratorio, porque sería tanto como aceptar convertirse en el patio trasero de Washington: debe evitar parecer débil, debe ser firme, sin concesiones en que el gobierno norteamericano los repatrié a su país de origen.
No hay que soslayar que Trump es misógino y no un misógino cualquiera, sino uno patológico y con poder, y Claudia Sheinbaum es mujer, y no permitirá que una mujer lo venza o le imponga condiciones, no obstante, es judía, y este sujeto contradictorio y voluble es probable que la vea de manera diferente, pues es presbiteriano y éstos creen a pie juntillas las historias y leyendas judías, narradas en la Biblia
Por otro lado, la comunidad judía en México que abiertamente apoyó a Claudia Sheinbaum, puede influir en Trump, por el control absoluto que el Lobby Judío ejerce en Washington, y por la subterránea y compleja red de intereses financieros, comerciales y políticos que el judaísmo internacional ha tejido por todo el planeta.
Una cosa es lo deseable y otra lo posible, en lenguaje trumpiano, la amenaza y la realidad, o sea, te aterro, te presiono y te rindes, te jodiste; te enfrento de tu a tu y negociamos en igualdad de condiciones y sexos, o no regresan por aquí, y punto.
A Estados Unidos nadie le ha pasado factura por la culpa que tiene en alimentar los flujos migratorios por los gobiernos dictatoriales, criminales, ladrones y genocidas que impuso; por las guerras civiles que alentó y financió; por el saqueo de la riqueza nacional que dejó parajes yermos, mano de obra exhausta, explotada y miserable, vetas agotadas y repúblicas bananeras; ni por las sanciones indiscriminadas y extraterritoriales que aplica para asfixiar económica y financieramente a los pueblos, creando miseria y desabasto de bienes y servicios, para afectar la economía nacional y especialmente familiar, creando una situación de escases de divisas, de escasas oportunidades de empleo y mal pagadas, además de disparar los indicadores del violentrómetro, lo que obviamente fomenta la migración, y la cereza en el pastel: culpa a los gobiernos sancionados de las consecuencias de esta estrategia miserable, perversa y ruin.
Ya es tiempo de obligar a Estados Unidos a que acepte la responsabilidad que tiene en la migración hacia el norte y de obligarle a que asuma los costos de este fenómeno social que alienta y alimenta, y no olvidar recordarle que es un país de migrantes.
AMLO le propuso a Trump invertir en los países expulsores para crear oportunidades y hasta exportó y financió programas de apoyo social, porque según él, había que atacar las causas que obligan a los migrantes a pasar las de Caín, cruzar el Darién y gastarse una fortuna en buscar el sueño americano, un paraíso que se esfumó, porque lo aniquiló la barbarie del neoliberalismo salvaje.
Para Estados Unidos es fácil invadir países, promover guerras y luchas fratricidas, desastres sociales y naturales, miseria y caos, y luego, con toda la desfachatez que permite el cinismo puro, sin el menor pudor, imponerle la solución y los costos a las víctimas de sus ambiciones infernales y políticas criminales.
¡Basta de sumisiones y humillaciones!, si Claudia Sheinbaum se porta a la altura de las circunstancias y repite la postura de AMLO, respecto a la autonomía e independencia nacional, tiene la oportunidad de pasar a la historia como la primera presidenta que le plantó cara al imperialismo decadente o como la primera presidenta que dobló la cerviz ante el imperio del mal.
En todo caso, me gustaría que cumpliera la amenaza, para saborear en vivo y en directo, cómo sería Estados Unidos, un día, uno solo, sin mexicanos.