Victor de Regil
La Junta Auxiliar de La Resurrección, se está convirtiendo en un verdadero problema para el gobierno municipal. Y es que, como sabemos, hace unos días, decenas de habitantes se manifestaron de forma por demás violenta, frente al Palacio Municipal del ayuntamiento de Puebla
La intención que manifestaron aquel día, fue un tanto absurda, pues exigían no continuar con la clausura de establecimientos de la zona, principalmente los que tienen que ver con la venta de bebidas alcohólicas. Así como el cese del cobro de impuestos y permisos; al referir que sólo deben recaudarse por su presidencia auxiliar.
Según los dichos de los manifestantes, estas medidas que exigen se firmaron durante la primera gestión del panista Eduardo Rivera, y fueron ratificadas hace apenas seis meses. A través del Convenio de Usos y Costumbres, que según comentan, da la posibilidad de llevar a cabo dichas acciones.
Sin embargo, acusaron que tras la clausura de un bar en La Resurrección, el Ayuntamiento de Puebla no respetó el acuerdo y pretende continuar con el cobro de licencias.
Ante esta situación, el presidente municipal, Eduardo Rivera expuso que ninguna presidencia auxiliar tiene la facultad para emitir permisos a establecimientos o cobrar impuestos. De lo contrario, cometen usurpación de funciones y deben ser denunciados ante las autoridades competentes.
Pero esta molestia por parte de los habitantes de La Resurrección no es reciente. Pues se tiene conocimiento de una manifestación en septiembre del año pasado, también por el cierre de establecimientos y los montos por retirar la sanción.
Hace 14 meses, un grupo de inconformes, frente al Palacio Municipal denunció cobros de 14 y hasta 30 mil pesos por el retiro de las clausuras.
Esto, del mismo modo que en la manifestación del pasado martes, mencionaron que éstas no son legales. Aunque el Ayuntamiento de Puebla afirmó que durante el operativo, no mostraron la documentación correspondiente para operar.
Después de esta violenta trifulca, la cual estuvo a punto de terminar con el derribo de la entrada principal de Palacio Municipal con un tráiler, pobladores de La Resurrección y elementos de la Policía Municipal de Puebla, el ayuntamiento reportó tres personas detenidas y cuatro heridas.
Eduardo Rivera detalló que tres de los heridos fueron uniformados y el otro; un trabajador del módulo de Turismo. Quien resultó con un ojo herido tras el rompimiento de cristales.
A su vez, el presidente municipal declaró que “resulta extraña” la manifestación violenta de los habitantes de La Resurrección.
Eduardo Rivera destacó que la relación entre la comunidad y el ayuntamiento marchó de manera normal en meses pasados. Incluso, expuso que la mayor parte de los apoyos sociales y proyectos de rehabilitación se concentran en Juntas Auxiliares como esta.
Tras ello, no descartó que haya “gato encerrado” y que estas confrontaciones tengan tintes políticos. Por lo que, exhortó a los actores políticos y pseudolíderes a conducirse bajo la sensatez, la responsabilidad y dar ejemplo de la civilidad.
Eduardo Rivera no descarta que los actos violentos de ayer sean producto de actores políticos.
Lo anterior, tras reiterar que se observó “manipulación” en el altercado, pero también tuvo conocimiento de que parte de los pobladores fueron amenazados. Incluso que fueron engañados con el supuesto retiro del agua potable y clausura de más negocios por parte del Ayuntamiento de Puebla.
Hasta el momento, Eduardo Rivera señaló que no existen acuerdos con la junta auxiliar, debido a que “la ley no es negociable”. Al mismo tiempo, recordó que incurrieron en diversos delitos; entre ellos privar de la libertad y mantener cautivo a un servidor público.
No se puede acordar, la ley no se negocia. Detuvieron a un servidor de manera ilegal, lo secuestraron, querían que soltáramos a los detenidos a cambio del funcionario”.