Gabriel Sánchez Andraca
Al medio día de ayer, se hizo correr un rumor en el sentido de que la candidatura de Morena para gobernar Puebla en el próximo sexenio, recaería en una mujer y ayer mismo se celebró una comida con representantes de diversos sectores sociales de Puebla, en el Centro Mexicano Libanés, en apoyo de la licenciada Olivia Salomón, ex secretaria de Economía del Gobierno del Estado.
Lo cierto es que hay mucha confusión en las filas del partido Movimiento de Reconstrucción Nacional, pues en su inmensa mayoría expresan su apoyo a los dos legisladores morenistas poblanos, que han destacado en los últimos años: el diputado federal Ignacio Mier y el senador Alejandro Armenta. Ambos han sido dirigentes de su respectiva cámara y han recorrido el estado buscando el apoyo de sus compañeros de partido para ser electos como coordinadores de los comités de defensa de la Cuarta Transformación.
La confusión aumenta, debido a que Morena no está bien conformado como partido político, le falta estructura, como a todos los partidos existentes, organización y unidad. Ya se irán aclarando las cosas en los próximos días.
LOS SIETE DIPUTADOS FEDERALES PRIISTAS, informaron ayer en un acto efectuado en la antigua Cancha de San Pedro, hoy museo Virreynal, en pleno centro histórico, sobre los trabajos realizados en el segundo año de su gestión.
Fue un acto rutinario, en realidad sin ninguna trascendencia, pero por ser este un año político, pues estuvieron presentes, además de los dirigentes locales del priismo tradicional, el dirigente nacional Alejandro Moreno Cárdenas, “Alito”, y el gobernador morenista Sergio Salomón Céspedes, así como el ex gobernador priista Melquiades Morales Flores.
Algo debieron tratar en secreto, pues el acto no merecía la presencia de esos personajes, si no hubiera una razón política para ello.
Hablaron brevemente el dirigente nacional del PRI y el gobernador Céspedes Peregrina, solo para agradecer a los siete, nomás siete diputados del PRI, por el trabajo realizado en bien de la ciudadanía. Otro personaje importante de la política poblana que estuvo ahí, fue don Eduardo Rivera Pérez, presidente municipal y proclamado ya, candidato del PAN para la gubernatura, apoyado desde luego, por su aliado, el PRI, aunque falta ver, se cumple la condición que los priistas pusieron para ese apoyo; que el candidato o candidata a la presidencia municipal de la capital del estado, sea del PRI.
Y USTED SE PREGUNTARA, ¿Qué hacía en un acto priista el gobernador morenista del Estado? Ese es precisamente el secreto bien guardado. Puede ser que el gobernador quiera mantener la tranquilidad política de la entidad, actuando con espíritu democrático y de respeto a todas las corrientes políticas, pero la malicia popular, sobre todo en asuntos de este tipo, siempre se sospecha de algo más que eso. Ya veremos qué pasa en el corto y mediano plazo.