Gabriel Sánchez Andraca
El acto realizado en Puebla el pasado sábado, en el que el diputado Ignacio Mier Velasco, coordinador de la bancada de su partido Morena rindió su informe, ha sido bien comentado por varios columnistas de la ciudad de México.
Esto no debe gustar al pequeño pero poderoso grupo local, de morenistas colocados en altos puestos públicos, que según comentarios tienen declarada contra el diputado poblano, una guerra sucia que lo único que logra es provocar descontento en las filas de ese partido, contra los mismos que quieren sembrar cizaña en las filas del partido guinda.
DURANTE EL ACTO QUE COMENTAMOS, NO hubo la más mínima mención hacia el pequeño grupo que según se dice pretende la división en las filas morenistas locales.
Ya hemos comentado aquí, que la guerra sucia en política, que importaron los panistas en el año 2000 a través de los “amigos de Fox” y que volvió a aplicarse en la campaña de Felipe Calderón, es un corrosivo veneno para la actividad política de los partidos.
Se basa en chismes, insultos, contra los que consideran adversarios, en los que se incluyen a familiares, todo con el afán de desprestigiar lo más que se pueda a algún político que aspira a un determinado cargo público.
A este tipo de campañas también se le conoce como “guerra de lodo”, porque está basada en rumores no comprobables y busca solo desprestigiar ante la opinión pública a aspirantes a cargos públicos para impedir que lleguen a ocuparlos.
QUE BUENO QUE LA GUERRITA ESTA, NO ENCONTRO respuesta del lado opuesto. Se ignoró incluso algo que fue público y notorio, la destrucción de la propaganda invitando al acto del informe del diputado Mier, en el Cholula Center.
El responsable de esa acción fue el alcalde panista de la ciudad de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, por considerarla, como le dijo su asesor, propaganda político electoral adelantada. Pero el asesor, no es militante del PAN sino de un partido opositor.
Los panistas nunca han sido políticos duchos, como lo han demostrado las veces que han llegado al poder nacional o local. Son algo más que inocentones, pero eso es cuestión de ellos.
ULTIMAMENTE HA HABIDO COMENTARIOS SOBRE el fracaso del grupo opositor al gobierno, la alianza formada por el PRI, el PAN y lo que queda del PRD, en su empeño por desprestigiar al actual gobierno federal.
Ni el gran “Alito”, egregio y brillante dirigente nacional del PRI; ni el destacadísimo político Marko Cortés, dirigente de Acción Nacional, ni el Chucho que todavía le queda al PRD, han podido dar un golpe.
Cada vez que ellos lanzan alguna “crítica” al actual gobierno, porque nunca han hecho una propuesta, no han presentado un proyecto alternativo a la 4-T, todo son críticas, las encuestas ponen en evidencia su fracaso. Andrés Manuel López Obrador, sigue manteniendo los índices elevados de popularidad que lo colocan como el segundo gobernante más popular del mundo, después del mandatario de la India.