OASIS
Gonzalo Valenzuela
Todo lo que desees lograr en tu vida tiene un precio, implica una renuncia, es un intercambio de trabajo, esfuerzo y dedicación por logros, éxitos y realización. Todo lo que desees lograr en tu vida requiere de disciplina y constancia, debes estar convencido de que eso que deseas es posible alcanzarlo, que tienes todos los recursos para lograrlo y que realmente vale la pena.
¿Valoras el sacrificio…? Cuando te sientes impulsado por el amor incondicional, todo lo que haces es fuente de alegría, todo tu ser rebosa de luz y amor, el sacrificio se transforma en esperanza, valor y Fe; porque se disipan las tinieblas, tu mente se aclara y se prepara para el éxito, tienes un propósito digno que alcanzar, es como una ola gigante que te arrastra hacia la playa de la felicidad.
Sigue la música que suena en tu corazón, tal vez te indique cuál es tu misión, cuál es tu vocación, entonces el sacrificio implica renunciar a otros proyectos que te desvían de tu objetivo trascendente y perdurable, al que has decidido consagrar tu vida, aquello que te apasiona y que disfrutas hacer.
Valorar el sacrificio es valorar el Amor, porque cuando amas te das sin garantía de ser correspondido, tu dicha está centrada en dar lo mejor de ti al ser amado, de entregarte en cuerpo y alma, porque sientes en ese momento sublime que no hay nada más importante para ti, lo mismo ocurre cuando descubres una razón por qué vivir, cuando descubres cuáles son tus capacidades y habilidades que puedes poner al servicio de los demás.
El sacrificio es redención, nuestro Señor Jesucristo cumplió su Misión, su sacrificio no fue en vano, sirvió para hacerte libre, para reconciliarte con Dios, de ti depende como uses esa libertad y lo que hagas con ella, si deseas darle valor al sacrificio que otros han hecho por ti, o al tuyo mismo que harás por los demás.
Cualquier sacrificio tiene sentido cuando está impulsado por el amor incondicional, cuando te motivan nobles ideales, cuando buscas la realización de otros o la autorrealización, pero antes tienes que revestirte de compasión, bondad, humildad y de paciencia sin límites, porque todo en la vida tiene un proceso y a veces es más importante el camino que el destino, es decir, los resultados.
¿Valoras el sacrificio…? Quizá vayas por la vida con tanta prisa, devorando las horas en actividades que te proporcionan placeres inmediatos, rodeándote de lujo y confort, gracias a tu acertada visión para los negocios o a tu exitosa carrera en la política, viviendo intensamente cada minuto que al concluir el día terminas exhausto.
Tal vez en alguna ocasión te hayas preguntado: ¿Qué es lo realmente importante?, porque lo que antes te proporcionaba placer y estímulo ahora sólo te genera tensión y ansiedad, te sientes sobrecargado, has sacrificado tu relación de pareja, tus hijos y tu vida espiritual para volcarte en actividades que te dan reconocimiento, fama y poder y aun así no te sientes satisfecho.
El sacrificio significa poder absoluto sobre ti mismo, que eres capaz de dominar tus apetitos, en aras de algo más placentero y trascendente, como es la comunión con el Ser Supremo y de todo lo que emane su espíritu. Sacrificio significa fortaleza para seguir hasta el final con ese propósito digno que guía tus pasos, tus pensamientos, tus acciones, tus actitudes.
¿Valoras el sacrificio…? Recuerda que el sacrificio es una elección, que está inspirada en el amor incondicional y el deseo de ayudar a otros a ser mejores o dirigida a tu autorrealización, porque el infierno o el paraíso están en tu interior. A pesar de tus errores y tropiezos sigue adelante, cada día te ofrece la oportunidad de ser mejor, aprende las lecciones de la vida y arremete con más fuerza y valor. Como siempre gracias por tus comentarios, preguntas y sugerencias en: oasis_govara@yahoo.com.mx