Psic. Gonzalo Valenzuela R.
Algún día, es una enfermedad que llevará tus sueños a la tumba contigo
A estas alturas del año en curso has tenido algunos logros, tal vez algunas frustraciones y recaídas, sin embargo, el tiempo sigue su marcha, es hora de hacer un alto en el camino y revisar lo que has hecho y lo que falta por hacer, recuerda que tu futuro depende de lo que hagas hoy, vendrá cargado de promesas, como suelo virgen donde plantarás tus semillas.
¿Qué falta por hacer…? revisa tus propósitos al inicio del año, piensa y escribe las razones de por qué quieres lograrlo, si de verdad es importante para ti, no te detengas, busca los medios para lograrlo, revisa tu Plan de Acción, fíjate nuevos plazos para la realización de cada una de las actividades que te permitirán ir subiendo escalón por escalón hasta alcanzar tu meta.
Siempre queda algo por hacer, importantes obras se quedan en el tintero, porque la atención se dispersó hacia otras que brillaban más o producían más ruido, una buena forma de saber qué tan importante fue, es darte cuenta del grado de bienestar físico, psicológico y espiritual que te produjo.
Ordena tus prioridades, existen falsas necesidades que imponen los comerciantes, con el fin de que consumas sus productos y te endeudas hasta los dientes para adquirirlas, te matas trabajando junto con tu pareja, mientras los hijos siguen esperando que les regales unos minutos de tu valioso tiempo, un tiempo de exclusividad, para convivir con ellos, que a veces llega demasiado tarde.
¿Qué falta por hacer…? si estás muy ocupado, tal vez te falten periodos de descanso para meditar, para disfrutar de las maravillas de la naturaleza, alzar de vez en cuando la mirada y contemplar el paisaje, toma aire, agudiza el oído, el tacto, percibe la belleza, el misterio, que te aguarda a cada paso.
La vida es tan bella como tú quieras hacerla, depende de ti, nadie más gobierna tus pensamientos, tú eres el responsable de tus actitudes, tú decides hasta dónde vas a permitir que las circunstancias y otras personas te afecten, no hay otro camino hacia la libertad interior que el autoconocimiento, la autonomía, la autodeterminación, el perdón, la fe en ti mismo y en un Ser Superior.
Tu conciencia te advierte lo que has hecho bien o lo que has hecho mal, lo que te falta por hacer, sólo tienes que escucharla, darte cuenta que sí es posible enmendar errores y cambiar los resultados de ahora en adelante, con creatividad y determinación, sin olvidar el sentido del humor, haz lo que tengas que hacer con alegría.
Si ya tienes identificado lo que te falta por hacer y las razones del por qué es importe, si investigaste cómo lograrlo y has elaborado tu plan de acción, sólo te falta persistir hasta lograrlo, tú mereces lograr lo que te propongas y que tu vida marche mejor cada día. Gracias por tus comentarios y sugerencias en: oasis_govara@yahoo.com.mx