OASIS
Gonzalo Valenzuela Ramírez
Gracias por quererme como nunca nadie lo hará
No hay tesoro más grande que una madre, el perfume más delicado, la sonrisa más tierna, el coraje que te impulsa hacia el logro de metas, la estrella más brillante, inspiración sublime, sus palabras, su imagen, incluso su recuerdo te redime de todo mal, es un ángel que te cuida y te salva, te da su amor incondicional, porque esa es su vocación.
Su interés primordial es saber que estás bien, que eres feliz, ella quiere verte crecer y volar, sin olvidar jamás las raíces del hogar, los valores que plantó en tu mente y tu corazón, tu madre espera que de vez en cuando le digas y le demuestres que ha hecho bien su trabajo, que su obra maestra no es insensible, ni está lleno de egoísmo e ingratitud.
Recuerda con amor y agradecimiento todo lo que ha hecho por ti desinteresadamente, pacientemente, las veces que curó las heridas físicas y las emocionales cuando eras pequeño, simplemente con una caricia y un beso. Piensa en sus desvelos, cuando te sentías mal y no podías dormir, cuando te preparaba los alimentos o llevaba al médico.
¿Cuándo te acuerdas de tu mamá…? sólo cuando estás en graves problemas, cuando es su cumpleaños o el Día de la Madre. Cuando necesitas algún favor, como cuidarte a los hijos, en los apuros económicos, cuando necesitas de un consejo, cuando necesitas consuelo, cuando hay que encontrar culpables de por qué no eres feliz.
Si tienes la dicha de tenerla aún viva, demuéstrale con tus palabras y hechos lo agradecido y feliz que te sientes de su compañía, devuélvele un poco de lo mucho que ella te dio, cuida de su bienestar como ella cuidó del tuyo y aunque seas mayor, lo sigue haciendo, sigue pidiéndole a Dios que te bendiga, que te ilumine, que te cuide, que te colme de amor.
El amor de una madre no tiene límites, trasciende las fronteras del tiempo y el espacio; sé que mi madre -aunque ya no esté en este plano-, me escucha, me protege, me envuelve con su manto divino de amor y sigue siendo mi ángel. Gracias madre por lo que fui, gracias por lo que soy y gracias por lo que seré.
Tú has sido, eres y serás una fuente de inspiración importante en mi vida, un ejemplo de amor, sacrificio y abnegación, una chispa de luz que enciende el motor de la fe, que me impulsa a salir de mi caparazón, para entregarme al servicio de los demás. Eso me enseñaste, eso es garantía de crecimiento personal y espiritual.
¿Cuándo te acuerdas de tu mamá…? espero que la recuerdes con cariño, que perdones y olvides los malos ratos, los errores del pasado, los desacuerdos, las discusiones. Concéntrate en todo aquello que les une, en ese lazo de amor indisoluble, ella hizo lo mejor que pudo con los conocimientos, experiencia y recursos con los que contaba cuando tú eras pequeño.
Ahora es el momento del reencuentro, de que le expreses todo tu amor, que le digas con todas sus palabras cuanto le amas, cuán importante es para ti. Si ya no está físicamente, envíale tu mensaje de amor a través de una oración, llévale flores a su tumba y trae a tu mente a diario, todos los recuerdos hermosos que conserves de ella.
Como siempre gracias por tus comentarios y sugerencias en: oasis_govara@yahoo.com.mx