Gonzalo Valenzuela
Recuerda que aun cuando no puedes controlar
tus circunstancias, puedes controlar tu actitud
El ser humano es un conjunto de hábitos; haces repetidamente innumerables actividades, asumes idénticas actitudes ante situaciones y eventos similares, sin duda han sido útiles para funcionar y adaptarte a las circunstancias que te han tocado vivir.
¿Cuál es el peligro de la rutina…? cuando sientes que te cansa, que te quita libertad, que te aburres. Sin embargo, las cosas repetidas no siempre deben perder novedad, ni brillo, siempre y cuando tengas la capacidad de percibir como nueva una misma cosa, una misma situación, a una misma persona.
Sucede a veces que ya no te relacionas con las personas, sino con la imagen preconcebida que tienes de ellas, ya no realizas tu trabajo de manera creativa y entusiasta, sino por un deber, por una paga, haciendo lo mismo de la misma manera, como lo has hecho durante años, de ser así la rutina te desgasta y sólo esperas que te salve la jubilación, que te llevará a otro tipo de rutina.
¿Cuál es el peligro de la rutina…? que te lleve a perder la capacidad de asombro, y en su lugar quede la monotonía y la apatía, cuando ante tus ojos todo pierde belleza, novedad y encanto, cuando se asome la tristeza en tu alma, y te sientas atrapado en esa cárcel auto construida, en la que todo el panorama lo ves negro y no pareces encontrar la salida.
La palabra clave para vencer al enemigo invisible de la rutina es vivificar; dar vida, confortar, animar; es decir, que todo lo que hagas hazlo como si lo hicieras por primera vez, revalora las situaciones y a las personas, tu trabajo, tu familia, enfócate en los aspectos positivos y novedosos que trae consigo cada situación y cada ser humano que se cruce por tu camino.
No caigas en la trampa de vencer a la rutina con la variedad, porque ésta viene de afuera, y tarde o temprano te hallarás en la misma situación de cansancio y hastío, apuéstale a un cambio interior, recuerda que la vivificación viene de adentro. La causa principal de la rutina no es precisamente la repetición, sino en la percepción que tienes de esa realidad.
¿Cuál es el peligro de la rutina…? que hagas a un lado el amor, empezando por el amor que te debes a ti mismo, ese amor que te hace tener un corazón radiante y te obliga a repartirlo entre tus semejantes, ese amor heredado por Dios y que te convierte en un ser poderoso, imprescindible, trascendente.
Recuerda que el bien y el mal siempre están dentro del hombre, lo mismo que la rutina y la capacidad de asombro. El corazón que ama se mantiene joven, dice un proverbio. Ama lo que eres, lo que haces, lo que tienes. Fluye con las situaciones de la vida, no te aferres al pasado, confía en el proceso de la vida, de esa realidad siempre nueva y cambiante, tu tesoro te espera en cualquier esquina, en cualquier recodo del camino, en la fábrica o en la oficina.
Jamás pierdas de vista tus sueños, porque sólo así lograrás la felicidad, siempre hay un motivo para seguir adelante y lograr tus metas, si estás dispuesto a pagar el precio para hacerlas realidad, hazlo con entusiasmo, no dejes que el comején de la rutina arruine tus horas, abre tu mente y tu corazón para que recibas todas las maravillas que hay bajo el sol y mucho más allá.
Sorpréndete de cada aurora, de cada día que tienes la oportunidad de respirar, deja huella en los lugares donde estuviste o estás y en las personas que te tocó animar, servir o ayudar. Siéntete el protagonista, el director y el autor del guion de tu vida, eres un ser completo, aun con todas tus carencias, recuerda que eres único, irrepetible y singular.
Como siempre gracias por tus comentarios, preguntas y sugerencias en: oasis_govara@yahoo.com.mx