Nelly Jiménez O’Farrill. Su gran experiencia, en el sector filantrópico, le ha permitido ser miembro del consejo directivo de varias organizaciones de la sociedad: CEMEFI (Centro Mexicano para la Filantropía A. C.), Un Mañana para la Comunidad A.C.,
Antenas por los niños A.C., SEDAC (Servicio, Educación y Desarrollo a la Comunidad A.C), Casa de la Amistad para Niños con Cáncer I.A.P., Comisión Unidos en Contra De la Trata A. C.
Algunos de los reconocimientos que ha recibido son:
* del Grupo Expansión, como una de las 50 personas más importantes que transforman a México.
* de la LXI Legislatura de la Cámara de Diputados Federales, por la construcción de un México mejor.
* del Club Rotario, por la colaboración con los ideales de servicio, interés por la comunidad y mejores relaciones humanas.
A tono con sus palabras: «… que nuestras acciones impacten socialmente, que creen consciencia y promuevan cambios positivos en la sociedad”; Nelly actúa movida por el amor y dentro de sus tantas pasiones ha descubierto que la literatura puede convertirse en vehículo para expresar inquietudes o reflexionar sobre la vida.
Bajo la tutela del maestro Miguel Barroso Hernández, en el Taller de Escritura Creativa Miró; adquiere las herramientas necesarias para narrar historias, reflejando temas universales.
Preámbulo de una historia de amor
¿Por qué complicarte la vida? Hay dos caminos y sólo tienes que elegir, pero siempre te ha costado trabajo escoger la mejor opción.
¿Recuerdas cómo, aquella tarde, el nahual entró al pueblo de Tequis?
Eras joven y no hiciste nada cuando se llevó a la niña Elena. Su prima Margot tampoco la pudo retener porque él fue más rápido, voló alto y en segundos estaba lejos, imposible de alcanzar. Desapareció tras las montañas y tú no reaccionaste: igual a hoy, sólo viste al horizonte… Sabes dónde encontrarlo y callas.
El nahual pasa por los pueblos recogiendo niños y sólo tú conoces la ruta a su guarida. Se los lleva como a Elena, que dejó de ser una niña, nunca sabrá qué le pasó y, aun así, será feliz.
La verdad, el nahual no es malo. Alega rescatar a los pequeños del maltrato y la violencia, pero realmente lo que sucede es que odia la soledad y por eso ha formado una gran familia allá donde vive, justo en el límite entre la tierra y el cielo.
Tú puedes convencerlo, si lo decides, para que se detenga. Los habitantes de varios pueblos viven temiendo perder a sus hijos; aunque, ciertamente, la idea de volar emociona a los chicos. Y es precisamente de esa inocencia de lo que busca rodearse el nahual y que los niños platiquen con sus sabios ancestros, como hiciste tú al ver a tu abuelita fallecida: la abrazaste y, tras muchos consejos, recordaron las canciones con que te dormías siendo bebé.
Ahora, puedes ir a la cima del mundo, regresar al lugar del que escapaste; rescatar a Elena y darle la opción de volver a Tequis. Podrás hablar con el nahual o enfrentarlo; porque ahora tú también gozas del mismo poder. Sólo necesitas volar y hacer lo correcto.