Gustavo Monterrubio Alfaro
Todos están atentos a lo superficial de la feroz campaña de deportaciones de Trump, que no se limita a los criminales y a los ilegales, sino a todo brazo sobrante.
La digitalización de la producción y los servicios dejó a la vera del camino millones de brazos excedentes, que el desarrollo de tecnologías accesorias mitigó relativamente, excedentes que la inteligencia artificial (IA) potenciará a niveles nunca vistos, con el agravante que el desarrollo de tecnologías accesorias absorberá una cantidad de mano de obra insignificante.
El lastre inmanente del capitalismo, el desempleo estructural, alcanzará cifras sin precedentes.
Esta crisis es a la que pretende adelantarse Washington, que los gobiernos satélite ni sospechan, como el mexicano, que los espera con los brazos abiertos y prepara empleos, acceso a la salud, educación y servicios, para recibir en la patria a los paisanos expulsados.
Simplemente, se está cumpliendo el pronóstico de Karl Marx, planteado hace alrededor de 170 años, no obstante, la obra se publicó hasta 1932.
Alcanzado un cierto grado de desarrollo técnico-científico, las fuerzas productivas materiales entran en contradicción con las relaciones sociales de producción existentes; esto abre un abanico de posibilidades de transformaciones, que pueden ser impulsadas por las masas desesperadas o por el capitalismo para relanzar el proceso de acumulación de capital.
¿Cuáles podrían ser los escenarios probables? ¿Las revoluciones sociales están canceladas? ¡No!, sólo serán posibles si los ejércitos se ponen a la vanguardia del pueblo y apuntan sus armas, no a éste, como ha sucedido en la historia, desde que LAS CLASES DOMINANTES SE APROPIARON DEL ESTADO E IMPUSIERON EL MONOPOLIO DE LA VIOLENCIA, sino precisamente si se revelan contra ellas. Hay casos en la historia de ejércitos que tomaron la opción por los pobres.
Esta revolución se tendrá que pelear en dos frentes: el de las balas y los misiles y en el cibernético. Es más, éste será el campo de batalla decisivo, porque puede paralizar al gobierno sí logra controlar los servidores y colapsar el sistema administrativo y operativo gubernamental y el sistema nacional de pagos, los sistemas militares de ataque y defensa, entre otros sectores sensibles a cyber ataques, en otras áreas, o si logra manipular, destruir o inutilizar los satélites.
Desde que el clérigo anglicano Thomas R. Malthus (1798), sobresaltara al capitalismo con su exagerada fórmula de la progresión geométrica de la población y la progresión aritmética de la producción de medios de subsistencia, está sobre la mesa la eliminación de los excedentes de población y se han ensayado diversas fórmulas, desde las guerras convencionales, civiles, tribales y fratricidas, la propagación de patógenos de laboratorio y naturales, esterilizaciones forzadas, campañas de “concientización” porque “la familia pequeña vive mejor”, en suma, reducir el número de hijos, cuyos resultados adversos los padecen las naciones promotoras de las mismas, sociedades que envejecen como la japonesa, y la china, que alteró la proporción natural entre hombres y mujeres y hoy trata de corregirla, al liberar y estimular a las parejas a tener más hijas e hijos.
SI INVERTIMOS LA ECUACIÓN DEL REVERENDO MALTHUS, PARA EXPLICAR EL PRONÓSTICO DE MARX Y LA CRISIS TERMINAL DEL CAPITALISMO, QUEDARÍA COMO SIGUE: LA PROGRESIÓN GEOMÉTRICA DE LA PRODUCCIÓN DE BIENES MATERIALES CON LA IA, CONTRA LA PROGRESIÓN ARITMÉTICA DE LA CREACIÓN DE EMPLEOS, POR CULPA DE LA IA.
El resultado de la fórmula invertida es la contradicción entre la oferta de bienes producidos, cuyo límite es el cielo, y la demanda de empleos, cuya pendiente es el infierno.
Este escenario apocalíptico ha sido pergeñado en novelas y películas de ciencia ficción: ciudades en ruinas, decoradas con abundante fauna nociva y basura, hacinamiento demográfico, escasez extrema de servicios públicos y productos básicos, donde la lucha por la supervivencia es feroz, a muerte.
El último ensayo de aniquilación masiva de los excedentes fue la falsa pandemia del coronavirus, que logró darle una trasquilada a los grupos sociales objetivo: los ancianos, porque consumen ingentes recursos en pensiones y atención médica, y los jóvenes, porque demandan empleos, cada vez más escasos. El objetivo es obvio: liberar recursos que los ancianos “improductivos” consumen y reducir la incorporación de los jóvenes a la PEA, a los niveles de empleo disponibles, que declinarán en relación inversa a la incorporación de la inteligencia artificial en la producción y los servicios, desde las actividades médicas hasta las domésticas.
MURDER, INC., EL SINDICATO DEL CRIMEN, LÉASE, LA GENOCIDA OMS, A LA QUE LA COMISIÓN, LÉASE, LAS 15 FAMILIAS CON FORTUNAS DE 100 MMDD O MÁS, QUE DECIDEN LA SUERTE DEL MUNDO, LE OTORGÓ EL CONTRATO PARA ELIMINAR LOS EXCEDENTES DE POBLACIÓN E INVENTÓ LA FALSA PANDEMIA, QUE NO FUE MÁS QUE UNA GRIPE COMÚN ESTACIONAL, Y NO LOGRÓ EL RESULTADO ESPERADO, PERO CUYAS SECUELAS AÚN SIGUEN COBRANDO VÍCTIMAS, MUERTOS Y YATROGENIAS IRREVERSIBLES, POR LOS EFECTOS ADVERSOS DE LAS TERAPIAS GENÉTICAS EXPERIMENTALES QUE INOCULARON, CON LA INFAME MENTIRA QUE ERAN VACUNAS; SE HA EMPEÑADO DESPUÉS DE ESTE SINIESTRO ENSAYO, EN DESLIZAR A LA PRENSA PRESUNTOS PELIGROS DE PANDEMIAS FUTURAS DE PATÓGENOS DESCONOCIDOS, MÁS MORTALES Y CONTAGIOSOS QUE CUALQUIER BICHO CONOCIDO, PARA LOS CUALES NO ESTAMOS PREPARADOS NI NUESTRO CUADRO INMUNOLÓGICO NI MEDICAMENTOS QUE LOS COMBATAN, SALVO EN CIERTOS CASOS, PORQUE A LA PAR DE LOS PATÓGENOS CULTIVADOS EN LABORATORIO, ÉSTE DESARROLLA EL ANTÍDOTO; POR MUTACIONES NATURALES, DETONADAS POR LA POLUCIÓN Y LOS DESHIELOS QUE PODRÍAN ALBERGAR BACTERIAS O VIRUS LATENTES Y LOS DESECHOS RADIOACTIVOS, O POR OTROS FACTORES.
No será fácil engañar otra vez a la población mundial con otra campaña mediática de terror, incertidumbre y mentiras absurdas, en complicidad con todos los gobiernos del mundo, sobre bichos microscópicos, reales o imaginarios, porque como diría Lincoln:
“PUEDES ENGAÑAR A TODO EL MUNDO ALGÚN TIEMPO, PUEDES ENGAÑAR A ALGUNOS TODO EL TIEMPO, PERO NO PUEDES ENGAÑAR A TODO EL MUNDO, TODO EL TIEMPO.”
Una feroz guerra conlleva el inconveniente que de iniciarse con parafernalia bélica convencional, es altamente probable que escale a nuclear, y esta opción sería la más estúpida, porque arrasaría también con los mismos que la desencadenaron.
Otra opción que ya ha sido planteada y aplicada, consiste en subsidiar el ocio; el divino diagogos, según los griegos, era privilegio de la clase dominante, en virtud que los esclavos producían y cultivaban lo necesario para que los nobles se dedicasen a cultivar las artes del pensar. ¿Qué significa en la actualidad?, significa que el cheque de desempleo en los países desarrollados o ayudas económicas en los países menos ricos se incrementen y dispongan de fondos suficientes para mantener un nivel de demanda mínimo, que mantenga funcionando al sistema capitalista a capacidad reducida, pero sin matar a la sagrada acumulación de capital.
Estos fondos provendrían de los ahorros obtenidos por la eliminación de los excedentes de población en los segmentos sociales objetivo, repito, ancianos y jóvenes, y obviamente pasarán la guadaña donde sea necesario; de un impuesto aplicado a los millonarios y ultra millonarios; de la reducción de la burocracia -la tarea que desempeñaba Musk, con el DOGE- y de las fuentes que sea posible, como un impuesto especial a la PEA, parecido al que aplicó Alemania para pagar las reparaciones económicas que le fueron impuestas en las posguerras; incorporar al padrón de contribuyentes las actividades de la economía informal, cuya elasticidad alcanzará el máximo de tensión, lo que será posible con la IA, y cualquier otra fuente disponible.
En este tránsito estamos, si todo transcurre dentro de los parámetros de la racionalidad, y la transición se desliza entre estertores de agonía de la hegemonía que muere, Estados Unidos, y el parto sin dolor, alumbra al nuevo imperio, la China.
¿Qué pasará? Exactamente no lo sé, sólo espero que lo peor ocurra, mínimo, en un siglo.
No obstante mi deseo, que no es más que eso, Europa se alista para asumir el rol inmarcesible que ha representado a través de la historia: convertirse en campo de batalla.
Aunque reina la confusión y la anarquía y la ambivalencia es la táctica y la estrategia, oscila entre enviar tropas de paz o de guerra a Ucrania, si éste país debe o no ingresar a la OTAN, si invierte o no el 5 por ciento en defensa, si desarrolla su propio sistema de defensa y sí invierte en su industria militar, si realiza maniobras de combate en la frontera rusa o se abstiene, si elimina la restricción del alcance de los misiles, ya liberó este peligroso límite, si continúa financiando una guerra proxy o sustituye los despojos del ejército ucraniano con tropas frescas de la OTAN, no obstante, las consecuencias funestas que implica, entre otros.
Sin el apoyo del hermano mayor, Estados Unidos, Europa se siente desamparada, y si el errático Trump decide cerrar las bases militares en territorio europeo, sus capacidades defensivas se reducen drásticamente, y éste, voluble e inestable como es su comportamiento habitual, ya apoya a Ucrania y amenaza a Rusia, ya amenaza a Ucrania y escora hacia Rusia; promueve negociaciones de paz y amenaza abandonarlas, le promete apoyo militar a países que comparten frontera con la Federación Rusa y empuja acuerdos bilaterales con Putin, ya alienta las hostilidades entre las europas del este y occidente, llama loco a Putin y lo amenaza con sanciones, llama dictador a Zelenski y lo sienta a negociar acuerdos sobre tierras raras, se suma al eje Berlín-Londres-París, aunque también se especula que tendría en mente repartir el mundo en tres bloques, al frente de los cuales estarían Rusia, China y Estados Unidos, envía marines a otra caldera en ebullición, Taiwán, y coquetea con Xi Jinping, en fin, la conducta típica de un mediocre con iniciativa, cuyas neuronas no dan para más que bandazos, presionar, aterrorizar, doblegar.
Parafraseando la introducción al Manifiesto del Partido Comunista: Un fantasma recorre Europa, el fantasma del comunismo. Todas las fuerzas fascistas de la vieja Europa y Norteamérica, se han unido en santa cruzada contra ese fantasma: Merz y Starmer, los radicales franceses de “En Marcha”, y los polizontes americanos.
A coro, esta cofradía de neonazis afirma una cosa, ya niega otra, se corrige, se contradice, vuelve a insistir y concluye que tal vez, no sé, es posible, etc. La anarquía se ha instalado en los palacios y capitolios donde se decide la suerte del mundo .
Todo este circo patético, pero altamente explosivo, lo desencadenó el tonto de Trump, que intentó emular al dictador nazi: pacificar Ucrania negociando directamente con Putin (El pacto de no agresión Molotov-Ribbentrop, impulsado por Hitler); repartirse Ucrania (Hitler y Stalin, se repartieron Polonia), dejando fuera de la negociación a Ucrania y Europa, pero se le hizo bolas el engrudo, como decimos por acá, no obstante, cada día que pasa las hostilidades escalan en el frente ucraniano y en el corto plazo podrían alcanzar el punto de no retorno, cuando Rusia de el salto de administrar la guerra: avanzar-retener posiciones, retener posiciones-avanzar, y lance una ofensiva simultánea a lo largo del frente hasta capturar Kiev, o bien, hasta que el eje Berlín-Londres-París + Washington, renuncie a la guerra proxy, recoja el guante y se bata en duelo con el oso ruso.
TODOS INVOCAN LA PAZ, DE LOS DIENTES PARA AFUERA, PORQUE TODOS REALMENTE, ATIZAN LA GUERRA.
AHORA BIEN, ¿DE ESTE PANDEMÓNIUM, QUÉ PODRÍA RESULTAR? CUALQUIER LOCURA, DESDE UNA PAZ HILARANTE, HASTA UNA GUERRA DESAFIANTE O UNA TREGUA INESPERADA.