La pregunta del millón

 

A unos cuantos días de que terminen los recorridos de las “corcholatas” presidenciables de Morena, ha cambiado totalmente el escenario.

Y es que, el presidente del CEN del partido lopezobradorista, Mario Delgado, reveló que será solo una pregunta, con valor de 75 por ciento en la encuesta, la que definirá al candidato o a la candidata a Palacio Nacional.

Si, como se prevé, ese modelo se replica en los estados que habrá elección en 2024, ¿a quién le favorece en el caso Puebla? ¿A Alejandro Armenta? ¿A Nacho Mier? ¿A Rodrigo Abdala?  ¿A Claudia Rivera? ¿A Julio Huerta?

Y es que, hace unos días, el influyente diario español El País, dio la primicia, tras una entrevista con el presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) morenista.

“La candidatura presidencial de Morena se definirá con una pregunta que valdrá el 75% de toda la encuesta”, se lee en la cabeza de la nota.

“El partido oficialista aplicará un cuestionario nacional en el que la pregunta de a qué ‘corcholata’ prefiere la gente tendrá un valor rotundo del 75%; los demás reactivos sobre los atributos de los aspirantes serán testimoniales”.

Dicha declaración de Mario Delgado, que consigna el diario español, tiene una relevancia devastadora, pues en las anteriores experiencias para definir las candidaturas a las gubernaturas, el único antecedente directo, Morena había aplicado cuestionarios con ocho preguntas.

Con ellas se medían atributos como honestidad, identificación con la Cuarta Transformación (4T), si el sujeto era cumplido en sus promesas, si defendía los derechos de las mujeres, si era competitivo y si tenía potencial como abanderado o abanderada, en resumen.

Pero hoy en día, para el caso de la selección del titular de la Coordinación Nacional de los Comités de Defensa de la 4T, es decir, del candidato o candidata presidencial, una pregunta definirá todo.   Habrá otras, pero con un puntaje tan bajo en el contexto de la calificación final, que en realidad no importan.

La gran pregunta que definirá al ganador, será esta: “¿A quién prefiere como coordinador o coordinadora de los comités de defensa de la Cuarta transformación rumbo a las elecciones de 2024?”.

La que valdrá 75 por ciento en la encuesta.  Ni más ni menos. Para sorpresa de todos.

Habrá que reconocer que ese método es el que propuso y empujó el ex canciller Marcelo Ebrard.

Aunque pudiera no favorecerle.  Pero se le dio gusto.

La decisión de valorar en 75% la pregunta de la preferencia electoral fue formalizada hace unos días en una reunión conjunta de las comisiones de Encuestas y Elecciones de Morena.

Ahora bien, si el modelo nacional, como se había anticipado, se reedita en los nueve estados que elegirán gubernatura, ¿qué pasa?

En Puebla, ¿a quién le viene “como anillo al dedo”?

¿A Nacho Mier, quien está remontando y en las últimas encuestas del BEAP, Más Data y Centro de Estudios Consultivos ya aparece como el puntero?

¿A Alejandro Armenta, quien por meses y meses ha presumido liderar todos los sondeos?

¿A Rodrigo Abdala, el delegado de Bienestar que sigue y sigue y sigue creciendo?

¿A Julio Huerta, quien desde que salió de Gobernación no deja de difuminarse?

¿A la ex alcaldesa capitalina Claudia Rivera Vivanco, quien se salvó de la inhabilitación y está en plena campaña, aunque depende de la definición de género femenino en la candidatura poblana?

Ya falta poco, muy poco para saberlo.