La nueva batalla de Puebla

 

Puebla se ha convertido en un gran botín político para los candidatos del oficialismo y de la oposición, pues su lista nominal es una de las más importantes del país, de ahí radica su importancia electoral.

Por ello, en la madre de todas las batallas electorales que ocurrirá en el 2024,  para lograr el objetivo autoimpuesto de consolidar la Cuarta Transformación, Morena postularía a sus mejores cuadros para la contienda por la Presidencia de la República y las nueve gubernaturas que estarán en juego ese año.

Y es que, la rentabilidad electoral y la paridad sustantiva no han sido la mejor fórmula para el partido gobiernista, no obstante su metodología para seleccionar candidatos. El algoritmo que pretenden utilizar, aplicado para definir a su abanderado en la Ciudad de México, por ejemplo, ofrecería un resultado distinto si incluyeran a Lázaro Cárdenas Batel y Rosa Icela Rodríguez. Las mediciones publicadas recientemente apuntan como principales aspirantes al jefe de la policía capitalina, Omar García Harfurch, y a la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada; pero también reconocen un escenario de alta competencia con los contendientes del Frente Amplio.

Todos estos factores son los que se miden para elegir a sus candidatos, no solo el que ganen una encuesta.

Por tanto, y con media docena de aspirantes a la candidatura de Morena en Puebla, esta disyuntiva resulta más contundente: lo que respecta a las mujeres, tenemos el caso de Olivia Salomón Vibaldo, actual secretaria de Economía en el gobierno del Estado es quien actualmente encabeza a las aspirantes cuando los sondeos no incluyen a la primera dama, Beatriz Gutiérrez Müller; a la señora Rosario Orozco Caballero, la viuda de Luis Miguel Barbosa, y a la actual titular de Semarnat, María Luisa Albores.

Recordemos que hace cuatro meses descartó dejar su cargo para buscar la candidatura, Albores encabeza uno de los bloques más consolidados del morenismo en Puebla. Y justo el pasado fin de semana, encabezó una asamblea popular en Acatzingo sobre el que llaman: Proyecto de Nación 2024-2030.

Por tanto, en la carrera por la nominación, el exsecretario del gobierno estatal, Julio Huerta, quiso tomar delantera hace tres meses, cuando dejó el gabinete para coordinar la promoción de Claudia Sheinbaum en la entidad. Además de su parentesco con el finado gobernador morenista (eran primos hermanos) tendría el respaldo de importantes sectores priistas, entre ellos el obrero. Recordemos que hace unas semanas Leobardo Soto, líder de la CTM, levanto el brazo al morenista y le ofreció su estructura.

De igual forma, dos expriistas estarían en la primera línea, en busca de la nominación morenista: se trata de los primos el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Alejandro Armenta, e Ignacio Mier, quien, hace algunos días, recibió el respaldo de medio centenar de dirigentes priistas, encabezados por Enrique Doger, exalcalde capitalino y exrector de la BUAP.

El presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados cuenta con el abierto respaldo del exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y del dirigente nacional del partido, Mario Delgado.

Pero no son los únicos, pues una facción partidista ha comenzado a construir una opción 100% morenista, con Rodrigo Abdalá, exdiputado federal y actual coordinador de los programas federales en la entidad.

Morena tiene una baraja amplia en Puebla, pero enfrentaría a una oposición con posibilidades reales de triunfo. El alcalde capitalino, Eduardo Rivera, llevaría mano en la postulación. La nueva batalla de Puebla, ha comenzad0.