Karen Paloma Núñez Acuña. Nació en la ciudad de Santiago, Chile. Actualmente, reside en la ciudad de Arica, puerta norte del país. Poeta y educadora, licenciada en Educación, con mención en Integración Educativa y diplomada de Educación Artística de la Universidad de Chile. Desde niña sintió afición por la poesía, plasmando innumerables versos que hablan de amor y desamor, del re-encantamiento por las cosas simples, de hacer consciente el presente y, sobre todo, de cuestionarse incansablemente respecto a la vida. Sus versos vieron la luz pública por primera vez, en la Tercera Antología Internacional de Poesía Sabersinfin. En su labor como educadora para la primera infancia, creó el Primer Festival de Poesía en Aymara en el año 2021, el cual busca incentivar e impulsar a jóvenes talentos poéticos, que contempla niños y niñas desde los cuatro años, hasta los catorce años de edad. Además, valorar y rescatar la lengua nativa de la cultura aymara; para finalmente, reunir a la familia en torno a la poesía. Actualmente (2023), el Festival de Poesía en Aymara, se consolida en su tercera versión realizada en el Colegio Alta Cordillera de la ciudad de Arica, Chile.
Cierra los ojos
Cuando sientas que el aire se agota
que los latidos de tu corazón se detienen
que tu caminar se hace más lento
y que la fragilidad desborda tu esencia
cierra los ojos
llévanos a ese último beso
al abrazo que nos reponía
nos construía
nos adormecía el dolor
llévanos a la aventura
a la risa genuina
al manifiesto intenso de nuestras miradas
diciéndonos todo
sin decir nada
cierra los ojos
recuerda nuestras promesas
los bailes en el balcón
las caricias de mis dedos recorriendo tu piel
mientras te susurro al oído cuanto te amo
lo prometo
me podrás sentir
incluso en la distancia
cierra los ojos
y estaré junto a ti.
Fuimos
Fuimos el primer rayo de luz atravesando por nuestra ventana
Fuimos el primer beso de la mañana
Fuimos el aroma intenso del café y unas tostadas
Fuimos la sonrisa del amor de madrugada
Fuimos la humedad de la ducha recorriéndonos
mientras nuestros brazos se entrelazaban para conectar nuestros cuerpos
pero antes de eso
fuimos las horas previas a nuestros encuentros
de esos viajes por el desierto
Cariño mío
fuimos el instante perfecto de nuestras almas
El silencio de nuestras miradas
Y esa sonrisa dulce que nos embaucaba
Fuimos lo perfecto de lo imperfecto
Fuimos un instante
amor agonizante
Fuimos lo que no debimos ser
En tiempo
En espacio
Fuimos en otra vida
quizás,
Amor mío,
fuimos en otra dimensión.