Jorge Luis Guerrero Montero. La tristeza también es parte de la vida

Jorge Luis Guerrero Montero. Músico veracruzano; toca saxofón y violín. Él tiene un diagnóstico de discapacidad intelectual, esta condición no lo define, pero sí logros que ha obtenido.

Egresado de la Lic. En Educación Artística en la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV). Fundador del Grupo musical TOQUE NUEVO, conformado por niños y jóvenes con necesidades educativas especiales y discapacidad. Fundador del canal de Youtube IncluyeTv, donde fomenta la inclusión. Miembro de la Orquesta Inclusiva de Veracruz que dirige el maestro Chanito Castillo.

Se ha presentado como conferencista en diferentes escenarios. Participó como presidente del Club León arte inclusivo por el Club de Leones de Veracruz. Es embajador en proyectos de Best Buddies y actualmente imparte clases de música a niños y jóvenes en coordinación con el H. Ayuntamiento de Veracruz. Autor del libro Despertar a la vida.

 

La tristeza también es parte de la vida

 

Un día muy triste en mi vida fue cuando falleció mi abuelita.

Todavía recuerdo la última vez que la vi y cuando veía las fotos que tenía en su pared; a ella le gustaba mucho verlas, me imagino que revivía sus recuerdos. Mi prima le puso muchas fotos en su pared, algunas en blanco y negro de cuando ella era joven y muy bonita. En las fotos se ve como se vestían en esa época, cuando se casó y tuvo a sus hijas; también hay fotos de toda la familia, amigos y familiares.

 

Recuerdo cuando fue su cumpleaños en el que estuvo muy feliz, la recuerdo con una sonrisa porque hasta música le llevaron. Ella vivió feliz porque su familia siempre estuvo a su lado y la cuidaba mucho. Una noche salieron mis padres de urgencia al rancho porque mi abuelita se puso muy mal y al día siguiente mi papá nos avisó a mis hermanos y a mí que había fallecido; no supe cómo reaccionar, en ese momento todo se me nubló. Después vinieron por nosotros para despedirnos de ella antes de su entierro, me despedí de ella y le dije lo mucho que la quería y le agradecí el cariño que nos dio y cómo nos cuidó.

 

Fuimos a la iglesia a su misa y, por último, al cementerio. Le dibujé un angelito en su lápida porque ella fue eso para nosotros en la tierra y sentí una enorme nostalgia porque ya no estaba con nosotros, pero siempre la tendré en mis recuerdos y en mi corazón.

 

Fue un momento difícil pero también debemos aprender a afrontarlo porque es parte de la vida y les quiero decir que cuando estemos ante esta situación debemos de ser fuertes, porque esas personas que nos dieron todo en nuestra vida y que cuando se van las extrañamos, se quedan presentes en nuestros corazones y siempre serán parte de nosotros. La vida es así, como dice la canción ¨La vida es un carnaval¨, que la vida es una hermosura y así hay que vivirla, así hay que disfrutarla, lo más que se pueda, cada minuto y cada instante, todo lo que sea necesario porque ese es nuestro destino.

 

Les comparto una frase que se me ocurrió:

 

¨El corazón es como un reloj, debemos darnos tiempo para todo lo bueno (amar, convivir, ayudar) y darnos menos tiempo para dañarlo con rencores, violencia y malos momentos. Hay que cuidarlo porque si lo descomponemos dañamos la marcha de la vida y debemos mantener el ritmo en nuestra vida siendo alegres, felices y haciendo felices a las personas que nos rodean¨.

 

Esta frase es importante para mí, porque, aunque mi corazón no está bien de salud, lo cuido siendo feliz y pido a Dios siempre lo mantenga fuerte y lo más sano posible. Dios conmigo y con ustedes.