Jorge Antonio Rodríguez y Morgado. El periplo del loco

JORGE ANTONIO RODRÍGUEZ Y MORGADO nació en la ciudad de Puebla, Ingeniero Civil, PhD. en Ciencias Técnicas, del Instituto Moscovita de Ingeniería y Construcción, relacionado con el sector de la construcción, amante de la numerología y del conocimiento de las fuerzas de la naturaleza, buscador de la Verdad. Hombre libre y de buenas costumbres. Columnista y comunicador de hechos de la vida cotidiana acaecidos en la historia de la humanidad.

 

El periplo del loco

 

Deseo saber el futuro,

lo que la humanidad exige.

Con todo su desatino,

Adán y Eva lo corrigen.

 

Muchas son las herramientas

que se pueden manejar

pero sólo son muy pocas

dignas de utilizar.

 

Desde las manos y ojos

el café y hasta los pies,

ouija, I Ching, monedas chinas

y hasta las cartas también.

 

Esas cartas milenarias

para adivinación se hicieron,

la consulta es obligada

para esta sociedad ahogada.

 

Tarot de cualquier creación

Marsella, Rider o egipcio,

todos sin duda darán

lo mejor de sus designios.

 

Son sólo setenta y ocho

las cartas de ese Tarot,

que con sólo veintidós

leen buen camino o atroz.

 

Veintidós arcanos mayores

componen la mancia añeja,

hechos de instinto y coraje

se integran a la realeza.

 

Cartas buenas, cartas malas

al derecho y al revés,

y con sus lindos colores

nos dicen el qué hacer.

 

Hay una carta especial

se le ha dado libertad,

para recorrer senderos

y saber su bienestar.

 

Una carta muy especial

que al final todos seremos,

por eso debemos estar

muy tranquilos y serenos.

 

Es el Loco quien transita

por todas las otras cartas

que viviendo su experiencia

la humanidad necesita.

 

Desde el Loco (0) que recorre

toda su vida afectiva,

parece que el tiempo vuela

pero el Mago (I) es quien lo vela.

 

Le siguen un par de damas

Sacerdotiza (II) y Emperatriz (III)

que guían el instinto del Loco

para hacerlo muy feliz.

 

Pero no es menor la influencia

del Emperador (IV) y el Sacerdote (V),

que con su cetro en la mano

le dan su merecida dote.

 

Salen los Enamorados (VI)

acompañados del Carro (VII),

que con Cupido a su lado

lo llevan como guijarro.

 

Aparece la Justicia (VIII)

junto con el Ermitaño (IX),

que con ley y la experiencia

hacen del Loco un humano.

 

La Rueda de la Fortuna (X)

como el karma de la vida

y esa Fuerza (XI) incontenida

le dan la dicha pedida.

 

 

De un solo pie el Colgado (XII)

esperando su destino

con la carta de la Muerte (XIII)

verá el Loco un buen camino.

 

La Templanza (XIV) necesaria

deberá prevalecer,

si no el Diablo (XV) dejaría

a su ser el fenecer.

 

Esa divina justicia

le hizo daño a la Torre (XVI),

pero la Estrella (XVII) del cielo

no permite que lo toque.

 

La Luna (XVIII) y su inconsciencia

hace que el Loco repare,

pero ese Sol (XIX) con potencia

lo insta a que no pare.

 

Llega el Loco a su final

con mucho Juicio (XX) en el Mundo (XXI)

por ese mental periplo

hizo un paseo muy profundo.

 

El Loco ha comprendido

que la experiencia es su dicha

por eso en la vida real

no se aparta de esa ficha.

 

Es cuanto, por el momento,

dirá ese Loco contento,

de haber pasado por todo

ese camino tan cruento.

 

Loco lo seremos todos

lo queramos sin desearlo

pero es una ley divina

creada para lograrlo.

 

Ya depende de nosotros

haber comprendido el modo,

que sin misterios de Dios

lograremos nuestro Todo.