Mirada de Otoño
Nada es como siempre.
Descubrí qué soy alérgico a tu rostro.
Donde descansa el ala traslúcida del
del ave.
Crucifícala si así lo dispones,
infecta a los pájaros.
¡Qué se quiebren las ramas!
¡Enloquezcan los bosques!
Su maldad engañó al mundo.
Cuando el silenció nos cubra
oscureciendo el…
se romperá el paisaje.
No siento la respiración de tu cuerpo en mis manos.
Sombra dibujada en la escritura.
…Suavizará la mirada de otoño.
¡Mujer!
Continente en discordia, cuerpo quemante.
Ave qué muere poco a poco.
Concluiré el poema con la ilusión de poseerte,
enmedio de las orgías del pensamiento,
hilos de mar, bosque de espejos…
fluyen verdades.