Hospital San Alejandro, historia de un fracaso

 

Victor de Regil

 

En una fecha tan emblemática para los mexicanos como lo es el 19 de septiembre, en 2024 se cumplen siete años desde que un sismo de 7.1 grados azotó el estado y con ello, se registraron afectaciones a uno de los hospitales más importantes de Puebla: el IMSS de San Alejandro. Desde el 2017, no se ha recuperado y su falta provocó el hacinamiento en otro nosocomio, el de La Margarita.

Ciertamente, el IMSS de La Margarita fue equipado para cubrir la demanda, pero, hasta el día de hoy, sigue con sobrecupo, falta de medicamentos y sus médicos no se dan abasto para atender a todos los ciudadanos que llegan. En el 2017, San Alejandro atendía un aproximado de 7 mil personas diariamente y todos ellos, tuvieron que ser canalizados a otras unidades.

El hospital de San Alejandro, hay que decirlo, por su capacidad de atención, era considerado uno de los más grandes de México y América Latina, el cual daba atención no solo a derechohabientes poblanos, sino también de los Estados vecinos como Tlaxcala, Oaxaca, Veracruz y Estado de México.

Han pasado dos sexenios, cuatro directores generales del IMSS, cinco delegados del Instituto en Puebla y la obra, de acuerdo con el presidente López Obrador, podría concluir este mes, pero será inaugurada por la nueva presidenta, Claudia Sheinbaum, hasta diciembre.

Por su parte, los derechohabientes siguen exigiendo celeridad en el proyecto, ya que, ante la falta de camas, la alta demanda y el agotamiento de los trabajadores, sus familiares han empeorado, no han sido atendidos a tiempo y hay casos en donde han muerto por esperar un turno.

Por su parte, los comerciantes que sobrevivieron tras su desplome, no consideran que la obra concluya en este mes como lo prometió AMLO, ni siquiera este año, pero si las autoridades lo logran, se convertirá en “un milagro” que reactivará toda la colonia Villa San Alejandro.

El antiguo San Alejandro contaba con 415 camas y La Margarita, solo con 178, por lo que este último aumentó su capacidad a 233 camas (30.8 por ciento más) y pasó de atender a 69 pacientes diarios en urgencias a 135 (95 por ciento más).

En un primer momento, se dijo que se tenía prevista la donación de un predio a un costado del Periférico Ecológico y que ahí se construiría un nuevo hospital, incluso, el ex director general del IMSS, Mikel Arriola, aseguró que sólo se tardarían 2 años en la construcción.

Posteriormente, adquirieron el Centro Internacional de Medicina (CIMA) por un monto de 427 millones de pesos y ahí se pretendía construir un nuevo hospital, pero jamás se utilizó. Hasta el 2021 confirmaron que se construiría una nueva sede en el mismo lugar y comenzó el desmantelamiento de San Alejandro.

En 2020, el nuevo director del IMSS, Zoé Robledo, firmó un convenio con la Sedena para la construcción del nuevo proyecto y en 2022 fue demolido. De mayo del 2022 a junio del 2023, se tuvo un avance solo del 1.6 por ciento. Mientras que de enero a junio del 2023 no se ejerció ni un sólo peso del financiamiento que se aprobó.

Para junio de este año, Robledo Aburto, y el secretario de Salud federal, Jorge Alcocer, visitaron Puebla para supervisar los avances de la reconstrucción. En el recorrido estuvo presente el actual gobernador Sergio Salomón, quien confirmó la inversión de más de 2 mil 300 millones de pesos y un avance del 70 por ciento.

El mandatario anunció que el nuevo hospital tendrá mil 600 trabajadores, 180 camas, 37 consultorios, 10 sillones de quimioterapia, 17 unidades de Hemodiálisis, Clínica de Mama, Sala de Hemodinamia, Tomógrafo y otras áreas de especialidades.

Se espera que el nuevo San Alejandro sea inaugurado por la presidenta Sheinbaum y el gobernador Sergio Salomón, lo que le pondrá fin a una historia de 7 años de fracaso en los que no se pudo reconstruir este importante hospital.