- La competencia se realizó de manera virtual en tres días de pruebas continuas
La Preparatoria Benito Juárez García de la BUAP es un semillero de talentos, ya que sus estudiantes se posicionan en los primeros lugares del medallero en diferentes concursos académicos y deportivos. Recientemente, Yoshimarth Maldonado Flores y Diego Ortega Ramiro, del tercer y quinto semestre, respectivamente, obtuvieron medalla de bronce en el nivel B de la XXX Olimpiada Nacional de Química.
En esta ocasión, la competencia se realizó de manera virtual del 23 al 25 de noviembre y participaron 122 estudiantes de 30 estados del país. En estos tres días de pruebas continuas, los alumnos de la BUAP realizaron exámenes de laboratorio, internacional y de categorías, en los que se abordaron temas de Química general, orgánica, analítica, fisicoquímica, inorgánica y cuántica.
En el primer día se presentaron tres pruebas, en un horario de 10:00 a 20:00 horas, con sus respectivos recesos y tiempos establecidos para subir documentos y enviar respuestas en la plataforma establecida. En el segundo día se realizaron exámenes teórico de Química general y práctico sobre analítica e inorgánica, parte 1 y 2, y en el último día el examen internacional.
Ana Yadira Ramírez Gaona, docente de la Preparatoria Benito Juárez y asesora de los estudiantes, detalló que los problemas a resolver tienen un nivel de dificultad de licenciatura. Para la parte de laboratorio “ellos describieron el procedimiento y resultados como si estuvieran en este espacio, por lo que tuvieron que determinar los valores, indicadores y demás aspectos con base en sus experiencias”.
Luego de ser seleccionados como parte de la delegación del estado de Puebla, conformada por seis jóvenes, Yoshimarth y Diego se prepararon durante tres meses con especialistas de la Facultad de Ciencias Químicas -entre ellos Luis Ángel Aguilar Carrasco, delegado de la Olimpiada Nacional de Química-, mediante asesorías virtuales.
La maestra Ramírez Gaona destacó que la obtención de ambas medallas de bronce es resultado de la calidad en la preparación que se imparte en las aulas, ya que en 2019 se obtuvo medalla de plata. “En salón de clases se descubren a aquellos jóvenes con ciertas habilidades y razonamiento ágil para cierto conocimiento, por lo que se les prepara y brinda asesorías para concursar en competencias de este tipo. Lo anterior, les permite potencializar sus habilidades y participar en talleres científicos. Esta unidad académica tiene talento, hay que aprovecharlo y estimularlo para que continúe creciendo”.