- Especialistas llaman a mujeres de todas las edades a acudir a sus clínicas, sin temor a la pandemia
- De los 10 principales cánceres tratados en el instituto, tres están directamente relacionados con el sexo femenino
- Instituto promueve servicios de salud reproductiva y planificación familiar
- En jóvenes, autoexploración y estudios deben ser constantes a partir de que inicia la actividad sexual
Los problemas respiratorios relacionados con la pandemia no justifican dejar monitorear la salud para prevenir enfermedades de las mujeres desde la adolescencia hasta la edad adulta, señaló el ginecólogo y obstetra del Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos” del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), Miguel Ángel Serrano Berrones.
El Issste dispone de servicios de salud reproductiva y planificación familiar en las unidades médicas, a través de los cuales se brinda orientación y consejería personalizada, en un ambiente de confidencialidad y respeto a sus derechos humanos, además de valoración por parte de la médica o el médico familiar; en caso necesario se refieren con un especialista.
En 2020, el Issste otorgó 524 mil 869 consultas de planificación familiar, de las cuales 213 mil 867 fueron de primera vez y 311 mil subsecuentes.
Las detecciones oportunas de padecimientos son determinantes para preservar la salud; no se debe subestimar ningún síntoma o molestia, sobre todo de cáncer de mama o cervicouterino. Es importante observar cambios en el organismo; ante señales de alerta se debe acudir a la unidad médica para la realización de estudios y con ello garantizar detección y atención temprana. Ello evita tratamientos invasivos como quimioterapias, radioterapias y complicaciones severas.
Entre las jóvenes, la autoexploración y los estudios de papanicolaou a partir de que inicia la actividad sexual, deben ser la constante para evitar padecimientos futuros, agregó.
Cada día hay mayor cultura de la prevención de la salud de las mujeres; sin embargo, es necesario dejar de pensar que las afecciones sólo surgen cuando llegan a la tercera edad o enfrentan la menopausia. Desde la adolescencia, es importante arraigar un modelo preventivo para evitar patologías como el cáncer de mama o cervicouterino, que en muchos casos aparecen en esta etapa pero no se les da importancia, señaló el especialista.
El cáncer de mama y próstata representaron 45.3 por ciento respecto del total de casos que atendió el Issste en 2020. De los 10 principales cánceres tratados en el instituto, tres están directamente relacionados con el sexo femenino (mama, cervicouterino y ovarios), representan 39.11 por ciento, como consta en el Informe Financiero y Actuarial, .
Serrano Berrones advirtió que los actuales estilos de vida han tenido impacto entre las jóvenes que, al tener dudas sobre el proceso de transformación física y emocional, no conversan con sus madres y padres porque trabajan todo el día y se ha reducido el tiempo de convivencia familiar para tratar temas relacionados al sexo, aparición de dolores y cambios corporales propios de la pubertad, entre otros.
Las adolescentes deben saber que hay instituciones como el Issste y asociaciones reconocidas, así como especialistas con respaldo médico que pueden aclarar dudas propias de su edad; se recomienda no acudir con personas sin conocimientos profesionales acreditados que, lejos de ayudarlas, llegan a ofrecer pseudotratamientos que podrían poner en riesgo su salud y vida.
El ginecólogo obstetra destacó la importancia de fomentar la ejercitación física regular y una buena alimentación para fortalecer la salud de las mujeres. Debe tenerse en cuenta que el sobrepeso u obesidad dificultan el diagnóstico de tumores o elementos extraños que desembocan en enfermedades; en algunos casos, oncológicas.
La medicina preventiva es el mejor camino para evitar enfermedades o reducir al mínimo su impacto, finalizó.