Por Teodoro Rentería Arróyave
En la ciudad-capital de Puebla, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, dijo una verdad de Perogrullo, es decir, incontrovertible: “La movilización realizada por la oposición ayer -domingo- es muestra de que vivimos en una auténtica democracia, Queda de manifiesto que vivimos en un país libre. En una dictadura no se podría ni hacer movilizaciones ni tampoco insultar al presidente. Me consta. Es distinto, ya no hay represión ni censura”.
Los que vivimos las agresiones en nuestra simbiótica participación de estudiantes y reporteros, sabemos de lo que hablamos, desde el Movimiento Médico y demás prolegómenos de la masacre de Tlatelolco del 68, donde la orden estricta y se hacía cumplir a sangre y fuego, en el sentido de que nadie, y nadie es nadie, se podía dar el lujo de criticar o manifestarse en contra del “señor presidente, del Ejercito y de la Virgencita de Guadalupe”.
A esta pregunta de una reportera: ¿Dicen que están amenazadas las instituciones que garantizan la democracia ¿Qué opina de esto? Contestación inmediata: “Es la democracia de ellos, la de los oligarcas, la de los ricos, la democracia de los corruptos. Y nosotros lo que queremos es que haya la democracia del pueblo. O sea, no queremos poder sin pueblo”, luego acusó que “muchos de los intelectuales que este domingo salieron a defender la democracia no dijeron nada cuando se consumaron los fraudes de 1988, 2006 y 2012”.
Jamás falta un negrito en el arroz y otras ausencias notorias en todas estas marchas y mítines “por la Democracia’, llevada a cabo con gran asistencia en el Zócalo capitalino y replicadas en numerosas ciudades de la República.
Empecemos por las ausencias, no asistió el líder formal del Partido Revolucionario Institucional, PRI, Rafael Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas ni la candidata presidencial de la llamada alianza opositora, Bertha Xóchilt Gálvez Ruiz y otros muchos personajes de esa nomenclatura.
El error garrafal es haber designado como orador único de la concentración a Lorenzo Córdova Vianello, ex consejero presidente del Instituto Federal Electoral, IFE, con lo que quedó más que comprobado que nunca fue un árbitro neutral, siempre representó y defendió a lo más caduco de las derechas en traición a la memoria de su señor padre, don Arnoldo Córdova, un político, un investigador, un hombre inquebrantable de la izquierda mexicana. teodororenteriaa@gmail.com
Periodista y escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana, Doctor Honoris Causa por la Universidad Internacional y Académico de Número de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.org, y www.clubprimeraplana.org, y el portal irradia noticias.com