Víctor de Regil
Dentro de la BUAP se está construyendo el inicio del segundo periodo del rectorado de Lilia Cedillo, lo que se augura será de gran éxito, pues en el primer periodo se encontraron muchas áreas de oportunidad que, seguramente, se verán cristalizadas para los próximos cuatro años que se tienen por delante.
Uno de los primeros y más importantes movimientos, se dio con el nombramiento de Damián Hernández como Secretaría General de la máxima casa de estudios, en sustitución de José Manuel Alonso, quien ahora estará a cargo de la Secretaría Técnica de la rectoría, la BUAP inicia el segundo periodo en el que está al frente la rectora Lilia Cedillo, con el que rendirá su cuarto informe de labores y para su toma de protesta para el segundo periodo en el que estará el frente de la Universidad.
Damián Hernández es un hábil operador, quien dejó constancia de sus dotes desde la era de Enrique Agüera, cuando, siendo muy joven, se hizo cargo de mantener la estabilidad al interior y exterior de la universidad, tarea qye realizó con gran éxito y buenos resultados. Damián Hernández tenía en sus manos el control político de la BUAP y de sus diferentes grupos, tanto en plano académico como estudiantil.
Posteriormente, en el año 2020 continuó en la operación política de la universidad para apoyar a Esparza ante la embestida del entonces gobernador, Miguel Barbosa, quien buscaba a toda costa meter a la cárcel al entonces rector, quien fue acusado de desvío de recursos y lavado de dinero también.
Con la llegada de Lilia Cedillo, Damián se mantuvo dentro de la vida universitaria, pero de bajo perfil, dejando todo el escenario para otros actores, como fue el caso de José Manuel Alonso, personaje que gozaba de una gran relación con el exgobernador, Sergio Salomón, lo cual sirvió para consolidar una gran relación con la administración estatal y que se vio reflejada con la construcción de la nueva CU 2.
Es así como el arribo de una nueva administración trajo nuevos tiempos también para la máxima casa de estudios, la cual, como recordamos, vivió una fuerte crisis a finales del mes de febrero y casi todo el mes de marzo, con el movimiento estudiantil que paralizó las actividades en la BUAP y evidenció que había cosas que no andaban bien al interior de la universidad y que tendrían que ajustarse.
La pasada elección de rector al interior de la máxima casa de estudios fue otra llamada de atención, ya que, aunque ganó ampliamente la doctora Cedillo, sí hubo otra vez una franja importante de votos del sector estudiantil que no estuvieron con ella y que apoyaron por ser antisistema al entonces candidato, César Cansino, quien sorprendió por la importante participación que logro obtener.
Por ello, Damián Hernández vuelve a escena a través de la Secretaría General de la BUAP para poner al servicio de la máxima casa de estudios y de la rectora todo su conocimiento de los grupos de la BUAP y sus dotes de negociación, amén de la excelente relación que, desde hace tiempo, Hernández Méndez tejió con el actual grupo en el poder.