Durante la conmemoración del Día del Maestro, el gobernador Alejandro Armenta expresó su indignación por las concesiones carreteras otorgadas en gobiernos anteriores, a raíz del trágico accidente ocurrido en la autopista Cuacnopalan-Oaxaca, donde fallecieron 21 personas, entre ellas nueve docentes y dos elementos de las fuerzas armadas.
Armenta calificó estas concesiones como “contratos de muerte y saqueo”, señalando que fueron firmadas sin considerar la seguridad de los usuarios, sino con el objetivo de beneficiar económicamente a unos cuantos. “Los contratos fueron hechos para proteger al concesionario, no al ciudadano”, declaró.
El mandatario denunció que los convenios permiten a las empresas decidir unilateralmente si amplían o no los carriles, incluso cuando el flujo vehicular lo exige, situación que, dijo, también ocurre en otras carreteras del estado debido a la redacción leonina de los contratos.
Reiteró que su gobierno no está en contra de los empresarios, sino de la corrupción y de quienes lucran con el bienestar público. En ese sentido, afirmó que buscará poner fin a estos abusos y proteger el interés de la ciudadanía.
En el marco del evento, donde también se entregaron reconocimientos a docentes con 30 y 40 años de servicio, el gobernador rindió homenaje con un minuto de aplausos a los maestros y maestras fallecidos en el accidente, reafirmando su compromiso con una educación digna y con condiciones de seguridad para todo el personal educativo.