-Mientras las vacunas llegan a toda la población mexicana, es muy importante seguir con las medidas de prevención de contagio, entre las más importantes son el uso correcto del cubrebocas y la higiene de manos. La información tomada de fuentes confiables será fundamental en la decisión individual de la aplicación de la vacuna.
Conservar la sana distancia entre las personas, hacer uso correcto del cubrebocas y cumplir con todas las medidas sanitarias, incluso una vez ya vacunadas las personas, seguirán siendo las mejores armas para protegerse contra la COVID-19.
Es importante que la gente se cubra la boca, ojos o nariz para evitar cualquier contacto con el virus, utilizando cubrebocas de tela con tres capas, doble cubrebocas en caso de que sean sencillos o usar cubrebocas quirúrgicos, porque en cualquier caso es importante cubrirse la boca y nariz, así como los ojos, y no ponerse nada, enfatizó Rocío Baños Lara, catedrática e investigadora de la Facultad de Medicina de la UPAEP.
El cubrebocas de tres capas es el que deben utilizar las personas para prevenir que salgan tanto las gotitas de saliva como evitar que entren las gotitas de saliva de otras personas, pero además es importante cubrir los ojos con lentes o careta para evitar que el virus entre por boca, nariz u ojos.
Advirtió que mucho tiene que ver con lo seguro que se sientan las personas al utilizar cubrebocas, careta o lentes, lo importante es mantenerse protegido si se está en contacto con otras personas fuera del hogar, además de evitar tocarse la cara con las manos, si no están lavadas o desinfectadas con algún gel antibacterial con alcohol, porque se corre el riesgo también de contagiarse de COVID-19.
Con respecto a la aplicación de las vacunas que hay hasta el momento para combatir al COVID-19, y de manera particular, la vacuna rusa Sputnik V, dijo que “siempre es bueno ver resultados publicados, porque nos da seguridad, porque eso significa que otros investigadores diferentes a los que están proponiendo la vacuna, revisaron minuciosamente las investigaciones y señalen que los estudios vertidos tienen toda la calidad que se necesita para confiar en los resultados obtenidos de esa vacuna”.
Subrayó que es importante tener en cuenta que todas las fases clínicas de todas las vacunas, de todas las candidatas vacunales, “vacunas aprobadas por uso de emergencia”, siguen bajo estudio y se necesitan observar por lo menos en un lapso de tres a cinco años para identificar cualquier efecto que se pudiera presentar en algunos individuos de la población, que pueden ser en la mayoría de los casos esporádicos y que sólo se sabrá con el tiempo.
Para conocer más al respecto, Rocío Baños Lara, comparte la siguiente información sobre la vacuna rusa, evidencia de su seguridad y eficacia.
Hasta el momento, se han registrado globalmente más de 103 millones de casos de COVID-19, enfermedad causada por el SARS-CoV-2; de estos casos confirmados, más de 2 mil han resultado en decesos [1]. En México, hasta el 2 de febrero se han reportado 1.8 millones de casos confirmados, con 83 mil casos activos, y más de 159 mil fallecimientos [2].
Dos vacunas han obtenido autorización de emergencia en México, la de Pfizer-BioNTech y la de Oxford Astra-Zeneca [3, 4]. La vacuna del instituto Gamaleya, Sputnik V, coloquialmente llamada la vacuna rusa, parece estar próxima a recibir aprobación para uso de emergencia también en nuestro país.
Los componentes de esa vacuna son dos adenovirus diferentes que funcionan como vectores virales, es decir, son virus inhabilitados para su replicación, que llevan en su interior el gen de la proteína S del SARS-CoV-2; en la primera dosis se administra un vector y en la segunda se administra el otro vector [5]. De modo que cuando los vectores se introducen a un individuo, la proteína S se expresa y el sistema inmunitario la reconoce como extraña y monta una respuesta contra ella. Esto hace que cuando nos enfrentemos al virus completo, nuestro sistema inmunitario pueda combatirlo porque ya cuenta con anticuerpos y células específicas que se produjeron mediante la vacuna.
En septiembre del año pasado se dieron a conocer los resultados de los ensayos clínicos de la fase 1/2 con esta vacuna [5]. Los ensayos se hicieron en 76 voluntarios adultos y sanos, que no habían estado enfermos de COVID-19, ni habían tenido contacto con personas enfermas. El 100% de los participantes desarrollaron anticuerpos neutralizantes tras la aplicación de los dos componentes de la vacuna, es decir, de los dos vectores virales. La vacuna también mostró capacidad de inducir la formación de células del sistema inmunitario (ayudadoras y citotóxicas) [5].
Hoy 2 de febrero, se publicaron los resultados del avance de la fase 3 ejecutada en Rusia con esta vacuna. En este estudio, participaron 21,977 adultos sanos, negativos al SARS-COV-2, y quienes recibieron la vacuna o el placebo; los resultados muestran que la vacuna tiene eficacia de 91.6% después de 21 días de la aplicación de la primera dosis [6]. La eficacia de la vacuna para prevenir casos severos de COVID-19 es del 100% [5, 6].
La mayoría de los efectos adversos tras la aplicación de esta vacuna son malestares similares a los de un resfriado, reacciones en el sitio de inyección, dolor de cabeza y debilidad [5, 6]. Según el reporte preliminar de fase 3, se presentaron 7,485 eventos adversos leves de un total de 12,296 individuos que completaron las dos dosis [6].
En Rusia la vacuna Sputnik V fue aprobada para uso de emergencia desde agosto del año pasado [7]. Actualmente esta vacuna cuenta con el mismo tipo de aprobación en Armenia, Túnez, República de Guinea, Hungría, Bielorrusia, Argentina, Serbia, Argelia, Palestina, Venezuela, Paraguay y Turkmenistán [8].
En este momento se continúan cuatro estudios de fase clínica 3 para esta vacuna, para vigilar la aparición de efectos adversos raros que solo se detectarán cuando millones de personas se apliquen las vacunas, y para evaluar efectos secundarios que pudieran surgir a largo plazo [9].
Es cuestión de tiempo que la COFEPRIS otorgue aprobación de uso de emergencia a la vacuna Sputnik V, con lo que se suma esperanza para la inmunización de la población mexicana, y con ello la posibilidad de regresar paulatinamente a las actividades de la manera que lo hacíamos antes de la COVID-19.
Mientras las vacunas llegan a toda la población mexicana, es muy importante seguir con las medidas de prevención de contagio, entre las más importantes son el uso correcto del cubre bocas y la higiene de manos. La información tomada de fuentes confiables será fundamental en la decisión individual de la aplicación de la vacuna.