Mirtha Castellanos Zequera. La Noche en la Cocina

 

Mirtha Castellanos Zequera. (Veracruz, México) Escritora, poeta y empresaria mexicana, Es egresada de la Escuela de Escritores de México S.O.G.E.M. Es Fundadora de las Revistas Virtuales: Young Talent Magazine y de la Comunidad Literaria Siglo XXI. Sus trabajos han sido publicados en periódicos, revistas y antologías nacionales e internacionales. Ha Publicado 15 obras literarias entre poesía y cuentos. Participa constantemente en eventos literarios. Ha sido reconocida por su trayectoria como escritora y poeta por el H. Ayuntamiento de Veracruz y por la Fundación 500 años de la Vera Cruz, A.C. en México.  Fue nombrada una de las 100 mejores poetas de Iberoamérica y del Caribe  por Editorial Hispana con sede en Atlanta, Georgia USA. Recibió la medalla de honor de Sor Juana Inés de la Cruz por su trayectoria poética y cultural en el 2021 por la Academia Nacional e Internacional de Poesía CDE Veracruz. Es colaboradora internacional del programa de radio El mirador de América que se transmite desde New York, USA.  Es CEO y Fundadora desde 1999 de Servicios Editoriales Castellanos. Es Directora General del Instituto de Escritura Creativa Siglo XXI. Actualmente es presidente de la Academia Nacional e Internacional de Poesía de la SMGE en la Sede de la zona conurbada de Veracruz y Boca del Río en México.

 

La Noche en la Cocina

 

Julia llegó a casa agotada y tensa. La puerta se cerró con un golpe seco, y Mario, con la mirada ansiosa, había dispuesto la cena con esmero. La mesa estaba adornada con velas encendidas y platos cuidadosamente dispuestos, pero el esfuerzo de Mario parecía desvanecerse al enfrentar la reacción de Julia.

 

—¿Qué es esto? —preguntó Julia con un tono frío, mirando el plato con desdén.

 

Mario, de pie junto a la mesa, intentó mantener la calma. Su voz era una mezcla de preocupación y tristeza.

 

—Pensé que una cena simple sería lo mejor. No quería que te preocuparas más.

 

Julia, en lugar de responder, lanzó el plato con furia contra la pared, causando que los restos de comida se esparcieran por el suelo.

 

—¿Crees que esto es suficiente para mí? ¿Cómo esperas que te respete cuando ni siquiera puedes preparar algo decente? —su voz era cortante, llena de desprecio.

 

Mario, con la cabeza agachada, sintió cómo sus esfuerzos se desmoronaban ante su mirada. Se retiró a su estudio, sus pasos resonando con una tristeza que llenaba el aire.

Ecos del Pasado

 

El origen de la furia de Julia se remontaba a su infancia. Creció en un hogar donde su madre, autoritaria y despiadada, dominaba cada rincón con una mezcla de manipulación y crítica constante. Su padre, sumiso y opaco, no tenía voz ni voto, y el amor se confundía con control y dominio. Julia aprendió que el poder era la única forma de amor y control, una lección que la acompañó a lo largo de su vida.

 

Búsqueda de Ayuda

 

El ciclo de dolor en su hogar continuó hasta que Mario, agotado y desesperado, decidió buscar ayuda profesional y legal. En una sesión de terapia, descubrió que su sufrimiento no era un camino sin salida.

 

—Lo que estás viviendo no es saludable —le dijo el terapeuta—. Julia tiene su propio pasado, pero eso no justifica el abuso. Tienes derecho a buscar respeto y apoyo.

 

Mario comenzó a asistir a terapia, encontrando en su grupo de apoyo una fuente de fortaleza y claridad. Además, consultó con un abogado especializado en derechos familiares, quien le explicó sus opciones legales para protegerse y tomar medidas contra el abuso emocional.

 

El Enfrentamiento

 

Con la asesoría de su terapeuta y el consejo de su abogado, Mario se preparó para un enfrentamiento decisivo con Julia. En una noche tensa, Mario le reveló a Julia que estaba buscando ayuda legal para protegerse y cambiar su situación.

 

—Julia, esto tiene que cambiar —dijo Mario con firmeza—. He estado buscando ayuda profesional y legal. Este ciclo de dolor y control no es saludable para ninguno de los dos.

 

Julia lo miró, su rostro una mezcla de sorpresa y furia. Su voz se volvió temblorosa, atrapada entre la rabia y la tristeza.

 

—¿Ahora me vas a dejar? —gritó—. ¡Nunca has sido lo suficientemente bueno para mí! ¡Es tu culpa que esto no funcione!

 

Mario mantuvo su postura, su voz firme a pesar del dolor.

 

—No se trata de dejarte, se trata de encontrar una solución. Necesitamos ayuda para romper este ciclo. He consultado a un abogado y estoy tomando medidas para protegerme.

 

Julia, en el clímax de su dolor, comenzó a llorar. La furia y el dolor reprimido se desbordaron, revelando el sufrimiento profundo que había estado escondiendo.

 

Renacimiento

 

El enfrentamiento fue un catalizador para Julia, que decidió buscar terapia individual. Enfrentarse a su propio pasado y sus patrones de comportamiento fue un proceso doloroso, pero necesario para su sanación. Julia comenzó a trabajar en sus traumas y en cambiar la forma en que entendía el amor y el control.

 

Mario, mientras tanto, encontró un nuevo hogar y comenzó a reconstruir su vida. Su tiempo en la terapia y el apoyo legal le permitieron ver su propio valor y aprender a establecer límites saludables. El ambiente en La Casa de los Azulejos continuó siendo un símbolo de sofisticación, pero la historia detrás de su elegancia reflejaba una realidad más profunda.

 

El contraste entre la imagen pública de Julia y su vida privada finalmente se desvaneció, dando paso a una nueva comprensión de sí misma. En el corazón de La Condesa, tanto Julia como Mario enfrentaron sus demonios, aprendiendo que la verdadera fortaleza radica en la autenticidad y el respeto mutuo.