Ninguna mujer debería morir al dar vida
• La muerte materna uno de los peores escenarios a nivel social, pues la
ausencia de la madre condiciona la ruptura del núcleo familiar.
• Es importante implementar programas de comunicación para que las
mujeres puedan exigir una atención oportuna y el acceso a las terapias
adecuadas
En el marco del Día Mundial de la Mujer,
la reflexión es que: Ninguna Mujer Debería Morir al dar Vida. En pleno siglo XXI, con todo
el avance médico y tecnológico que vivimos por doquier y a cada momento, es difícil
de creer que en México aún se enfrenten problemas tan serios como la muerte
materna y, el más claro ejemplo de esta realidad es el reciente fallecimiento de la actriz
Fabiola Jazmín Ortega, en Monterrey Nuevo León, que aparentemente falleció por
preeclampsia y sangrado hemorrágico.
“Entre 2016 y 2021, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y
del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), murieron en nuestro país
5,099 mujeres por causas relacionadas con la atención obstétrica, es decir, cerca de
850 al año, aproximadamente dos al día.
Estas cifras muestran que la mortalidad materna sigue siendo un grave problema en
México, pero también representa uno de los peores escenarios a nivel social, pues la
ausencia de una madre condiciona la ruptura del núcleo familiar”, comentaron las
doctoras Irma Viridiana Cruz – Médico Materno Fetal y Brenda Dzul García –
Coordinadora del área de medicina materno fetal de la clínica de atención integral
para la mujer “Romero Rubio” de la Secretaría de Salud-.
Las especialistas nos hablan de las dos condiciones más frecuentes y que provocan la
muerte de la madre y/o el bebé, y de las graves consecuencias que pueden aparecer
si no son atendidas a tiempo y si las mujeres no tienen acceso a los tratamientos
adecuados.
¿De qué hablamos?, nos comentan las doctoras. Pues bien, del sangrado abundante
y de la preeclampsia, los dos padecimientos más recurrentes en el tema de la Muerte
Materna, durante o después del parto y que significan una emergencia médica grave
que puede poner en peligro la vida de la madre y del bebé.
“Ante este panorama, puntualizaron las doctoras Cruz y Dzul, es crucial que los
médicos sepan que en el sector salud hay medicamentos de los cuales pueden hacer
uso para llevar a buen término el embarazo. Es importante que las mujeres
embarazadas pregunten a su médico, cuáles podrían ser sus factores de riesgo en el
embarazo y sean conscientes de los signos de alarma que pueden llegar a presentar.
Y es que cualquier futura madre, no puede imaginarse, que después de haber dado a
luz, en lugar de celebrar la llegada del bebé, le toque enfrentar una situación de vida o
muerte, debido a una hemorragia descontrolada o a la preeclampsia”.
Los expertos nos explican ¿Por qué ocurre esto? “Hay varios factores en juego, uno de
ellos es que la infraestructura y unidades médicas, deben de seguir reforzándose,
innovando y actualizando con nuevas prácticas en la atención de emergencias
obstétricas y el uso de medicamentos que ya están en el cuadro básico.
Dado lo anterior, comentan las doctoras, es muy importante que las mujeres sepan
que el acceso a la atención médica es la clave. Si una mujer experimenta signos de
alarma, cada minuto cuenta. Por ello, es fundamental que la paciente reciba atención
inmediata y adecuada, con el fin de prevenir desenlaces fatales y así salvar su vida”.
Finalmente, las especialistas comentaron que se están tomando medidas para
abordar este problema. Las doctoras Cruz y Dzul, apoyadas por la
industria farmacéutica están siendo parte importante de programas de capacitación
y/o de educación médica continua para el personal de salud en el manejo de
emergencias obstétricas y el uso adecuado y oportuno de los medicamentos que se
encuentran dentro del cuadro básico y que están indicados para disminuir el
sangrado y evitar una hemorragia y controlar la presión arterial en caso
de preeclampsia.
“Este proyecto de capacitación en el que estamos participando, se extenderá a las
mujeres que están siendo atendidas en los hospitales del sector salud, con la finalidad
de que detecten a tiempo los signos de alarma, acudan al médico con oportunidad y
sepan que estas dos circunstancias en el embarazo son tan comunes como
remediables. Insistimos, la educación y la concientización son la clave para salvar
vidas.
En suma, la muerte materna por sangrado hemorrágico y preeclampsia, es una
tragedia que se puede prevenir. Es responsabilidad de todos, autoridades,
profesionales de la salud y la sociedad en general, trabajar juntos para garantizar que
todas las mujeres tengan acceso a la atención médica oportuna y de calidad durante
y después del embarazo, el parto y el postparto. Porque cada vida perdida es una
tragedia que podemos evitar”. Finalizan las doctoras Irma Viridiana Cruz y Brenda Dzul.