Victor de Regil
A diferencia del verdadero relajo que se trae Morena y sus aliados para elegir a sus próximos candidatos a la gubernatura, los 217 municipios, el Congreso de Puebla, así como los diputados federales y Senadores, en el caso del Frente Opositor, conformado por el PRI-PAN-PRD, parece que existe un consenso sobre quien será el candidato al gobierno del Estado que represente a esta coalición.
Los tres partidos, han coincidido que es Eduardo Rivera el que mejores resultados presenta y quien tiene las mayores posibilidades de ganarle a la poderosa maquinaria de Morena quien, desde el poder, llevan meses orquestando lo que será la elección de Estado más grande, vulgar y descarada de la que se tenga memoria.
Incluso, como recordamos, hace algunas semanas el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, vino a Puebla a levantarle la mano dando, casi casi, por un hecho, que sería Lalo el que encabezara este proyecto.
La realidad es que el alcalde de Puebla, no se ha pronunciado abiertamente sobre si buscará dicha candidatura o no. Hace unos meses, se dice, prefería quedarse en su cargo y buscar la reelección; pero, con la irrupción de Xóchitl Gálvez en la escena nacional, a Eduardo, dicen sus más allegados, tuvo una mayor motivación para pelear por la gubernatura.
Algunos de los rumores indican que también está esperando ver quien será el candidato del oficialismo, pues no es lo mismo enfrentar a Alejandro Armenta o Nacho Mier, que a Julio Huerta o a Olivia Salomón. Sabe que, a los dos primeros están fuertemente posicionados en todo el Estado y será muy difícil ganarles a cualquiera, contrario con lo que sucedería con los dos últimos, que tienen un conocimiento bajísimo.
El próximo 15 de octubre, será su segundo informe de gobierno, evento en el que espera reunir a más de 10 mil personas en el auditorio GNP, evento en el que muchos esperan dará señales sobre si se queda como alcalde o, en las próximas semanas, pide licencia para hacerse de dicha candidatura.
Pero, evidentemente, Eduardo no tiene la candidatura en la bolsa, por más que traiga el respaldo de su partido y las demás fuerzas políticas que forman la coalición opositora pues, el tema de género también es un asunto que tiene que considerar el PAN y los demás partidos donde, recordemos, el INE exige a los partidos y a las coaliciones, que de las 9 gubernaturas que se disputarán en 2024, incluida la Ciudad de México, 5 de ellas tendrán que ser, de forma obligatoria, para mujeres y 4 para hombres.
Por ello, no es de extrañar la reciente llegada de la ex senadora de Morena al PRI, Nancy de la Sierra, quien fue presentada con bombo y platillo por el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno. Desde ese primer momento, Nancy anunció que buscaría la candidatura al gobierno de Puebla por parte del Frente Opositor.
En un escenario donde la oposición tuviera que decantarse por el género femenino, Nancy de la Sierra tendría que ganarse esta posición compitiendo con sus ahora compañeras priistas Blanca Alcalá y Lucero Saldaña; de igual forma, competiría con las panistas Anata Teresa Aranda y Genoveva Huerta.
Aunque la mayoría de los analistas consideran que el verdadero objetivo de Nancy, y la negociación que hizo con “Alito” Moreno, es la de hacerse de la candidatura de la oposición por la alcaldía poblana, posición que, al menos hasta ahora, parece más que amarrada para el panista Mario Riestra.
Así que, un escenario sumamente probable es ver a Eduardo Rivera, como candidato a Gobernador, como posición del PAN, y a Nancy de la Sierra como candidata a presidenta municipal de Puebla, posición evidentemente priista. En este escenario, se dice que Mario Riestra podría ser incluido en la fórmula al Senado. Las cosas se siguen moviendo, estamos a unas cuantas semanas de saber lo que pasará.