Por: Atilio Alberto Peralta Merino
No resulta por ninguna circunstancia menor o baladí, la encomienda que como encargada del despacho de relaciones exteriores ha afrontado Carmen Moreno Toscano, al encargarse de los preparativos del encuentro entre el presidente y Úrsula Von der Leyen.
La presidenta de la Unión Europea arriba a nuestro país en medio del complejo panorama que representa por una parte, el inicio formal por la sucesión de poderes en México, y información que fluye respecto a la clara derrota de la OTAN ante las tropas rusas en Zaporiyia por la otra.
Llega procedente de un periplo por Brasil, Argentina y Chile en el cual, recibió acres críticas del presidente brasileño, tanto por lo que hace a su pretensión de introducir mayores sanciones en el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur por lo que hace a las consideraciones de medio ambiente previstas en su clausulado, como por lo concerniente a su apoyo al régimen de Kiev.
Respecto a nuestro país, la presidenta de la unión pretende alcanzar un acuerdo bilateral equivalente al suscrito con Chile el año pasado, cuya finalidad se centra en el tópico referente al régimen de contratación gubernamental.
Resulta inquietante tratar de dilucidar que más puede pretender el interés europeo en tal rubro, México , sin ser parte adscrita al código de contratación gubernamental acordado en el seno de a ronda Doha de la Organización Mundial de Comercio, expidió legislación sobre un instrumento claramente lesivo el interés público como es el referente a las denominadas “asociaciones público-privadas”, y recibió la auténtica invasión de “un rebaño de elefantes blancos” proveniente de España, tal y como, parafraseando a Rubén Darío, la vaticinara en el ya lejano año de 2012 Jacobo Zabludovsky en un célebre artículo publicado en las páginas de “El Universal”.
Por su parte, según deja constancia Federico Campbell Peña , reportero de amplia trayectoria cubriendo la fuente internacional: organizaciones civiles pidieron audiencia a Úrsula von der Leyen, en cuya tesitura, según reporta Federico Campbell: “Porfirio Martínez de «Mexicanos Unidos» aseguró que este Acuerdo comercial vigente, precisamente va más allá de lo comercial porque integra la «cláusula democrática» que vigila la situación de derechos humanos y democracia en nuestro país; citó , asimismo a Leo Gabriel de la revista «Lateinamerika», así como a la diputada verde europea Ska Keller , quién asevera haber sido testigo del asesinato del joven ecologista finlandés Jyri Haakkola junto a la mexicana Bety Cariño en Oaxaca en 2010.
Ante el tibio y escuálido interés mostrado por la prensa ante la visita a México de la presidenta de la Unión Europea, la nota de Federico Campbell es diga de llamar la atención, particularmente ante el disgusto que al efecto fuera manifestado por los integrantes de “ Mexicanos Unidos” quién espetó con contundencia: “jamás he sido entrevistado por este medio de comunicación, por lo que exijo se haga la aclaración correspondiente”.
En la nota en cuestión , dicho sea de paso, jamás se habla de que haya sido llevada a cabo una entrevista, aún cuando, hasta donde entiendo ésta se habría llevado a cabo en el pasillo del Hotel Sheraton, pero, si en todo caso, el reportero obtuvo la información de alguna entrevista, de despachos informativos o incluso, dado el caso, de alguna filtración no está obligado de manifestarlo en caso alguno.
El día 15 de junio a las 0.12 p.m., Úrsula Von der Leyen publicó un cominicado en el que expresaba que no se reuniría con las denominados ONG,s , el cual podría haber contrariado a los señores de “Mexicanos Unidos”, pero bien valdría la pena hacerles, si no lo han hecho así sus mentores de USAID ( o sea la CIA), que la acción que corresponde en todo caso en hacer valer el derecho de réplica que se consigna en el Artículo 6° de la Constitución, e incluso en el decreto preconstitucional de Venustiano Carranza del 12 de abril de 1917, en cuyo ejercicio podrían aclarar en caso de considerarlo conveniente que no consideran verdad que el : “Acuerdo comercial vigente, precisamente va más allá de lo comercial porque integra la «cláusula democrática» que vigila la situación de derechos humanos y democracia en nuestro país”; ya que cualquier medio que, con la autorización del autor de la nota la reproduzca no hace otra cosa más que ejercer el derecho a la información que el propio precepto en cuestión garantiza.
En todo caso, los señores de “Mexicanos Unidos” podrían sancionar laboralmente a los integrantes de su propia organización, de considerar que hubo alguna filtración, como los que al efecto pudieron haber filtrado en su momento que en los días del gobierno de Vicente Fox, en octubre de 2004, Juan Rebolledo Gout se encargó de la ingrata tarea de reconocer el cadáver de su cuñado, Carlos Fernando Márquez Padilla quién se desplomó de la Torre de Pemex.
La noticia difundía la versión de un suicido en la que personal médico de PEMEX había retirado documentos de la vestimenta del occiso que en vida, además de encontrarse casado con María Amparo Casar, laboraba en el área de la paraestatal a cargo del hermano del entonces vocero presidencial Rubén Aguilar, y que al momento se encargaba de auditar a la empresa Oceanografía, estrechamente relacionada a presuntos actos delictivos a cargo de los hermanos Bribiesca Sahagún.
La viuda de Márquez Padilla declararía en la ocasión que el documento, materia de la suspicacia, se constreñía en exclusiva a un listado telefónico concerniente a 14 líneas, pese versiones de prensa que señalarían que existió otro listado referente a cuentas bancarias, entre las que se llegaron a filtrar las siguientes: 06084672385 de la institución de crédito HSBC y 00454191994 de BBVA Bancomer.
Héctor Tenorio Muñoz-Cota y un servidor, por nuestra parte, dirigimos una carta abierta a Úrsula Von der Leyen en los siguientes términos:
“Los integrantes de la revista Unidad Parlamentaria hemos sido pretendidamente objetos de inquisición de la policía Canaria y un fiscal de la misma región, de manera extraterritorial, sin que se observarán los procedimientos de cooperación, ya fuese policial, ministerial o judicial con las autoridades mexicanas; lo cual vulnera la soberanía e integridad territorial del país.
Por lo que aprovechamos su estancia en territorio nacional a efecto de solicitar sus buenos oficios para evitar tales atropellos. Atendiendo al hecho que el reino de España es parte de la Unión Europea.”
albertoperalta1963@gmail.com