García Luna y sus nexos en Puebla

 

Tras una histórica resolución por parte del sistema de justicia de los Estados Unidos de América, la sentencia de culpabilidad, en cinco cargos por sus relaciones con la delincuencia organizada, del otrora secretario de Seguridad Pública y estratega de la “guerra” calderonista contra el narco, Genaro García Luna, en definitiva han cambiado las cosas gravemente para Facundo Rosas Rosas, quien fue su mano derecha en varias responsabilidades y su lugarteniente en Puebla, en parte del morenovallismo.

Es suficiente con recordar que con Facundo Rosas como titular de Seguridad Estatal, creció exponencialmente el huachicol en Puebla. Sus mandos directos terminaron en la cárcel, por complicidad con los chupaductos.

Además, en un lamentable hecho en el gobierno de Rafael Moreno Valle, él fue el principal responsable de la trágica muerte del niño de Chalchihuapan en 2014, en un torpe operativo policiaco para desalojar una manifestación.

Todo eso, sin contar que desde antes del sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa, durante el gobierno de Vicente Fox, el ex secretario de Seguridad Pública de Rafael Moreno Valle fue uno de los principales colaboradores de García Luna.

De hecho, el hoy procesado en Estados Unidos lo recomendó al entonces gobernador poblano. Y juntos “manejaron la plaza”.

¿Es creíble que Facundo Rosas no participara de la colusión que un jurado estadounidense consideró que sí existió en el desempeño de Genaro García Luna?

Los cargos que se le achacaron al funcionario calderonista, en la Corte del Distrito Este de Nueva York, en Brooklyn, solamente para recordar, son:

Conspiración para la distribución internacional de cocaína.

Conspiración para la distribución y posesión internacional de cocaína.

Conspiración para importación internacional de cocaína.

Declaraciones falsas para solicitar la ciudadanía estadounidense en 2018.

Participación continua en El Cartel de Sinaloa, banda a la que supuestamente brindó protección.

¿De verdad sus principales colaboradores no participaron en ninguno de esos presuntos delitos?

Facundo Rosas, con mucho éxito, ha venido librando cualquier señalamiento penal. Lo hizo respecto de su presunta responsabilidad para solapar a las bandas del huachicol.

Ocurrió también sobre su supuesta participación en el operativo Rápido y Furioso, con el que se introdujo desde Estados Unidos armamento a México, para terminar en manos de narcotraficantes.

Luego con esas armas fueron asesinados marinos, elementos del Ejército y policías.

Pero de todo ha venido saliendo avante Facundo Rosas.

Si terminó en la cárcel, a finales de enero de 2022, fue por homicidio imprudencial, ya que arrolló en la Ciudad de México a una anciana. Luego fue trasladado a un penal federal en Sonora, por el caso de las armas que fueron introducidas ilegalmente. Pero de ahí también consiguió la fuga jurídica.

Cuando fue aprehendido, por cierto, culpó al presidente Andrés Manuel López Obrador de “perseguirlo”.

Lo hizo gritando, mientras era subido a un vehículo, tras su arresto. Se quiso hacer pasar por “preso político”. Por supuesto, no le resultó.

Ahora, toda esta historia ha cambiado a partir que Genaro García Luna fue encontrado culpable, en una Corte de Nueva York, de los cinco cargos graves por los que está siendo procesado y por los que seguramente pasará tras las rejas el resto de su vida.

 

Hay muchas preguntas en torno a Facundo Rosas. Sobre su desempeño en Puebla. Sobre lo que supo en el contexto presuntamente delincuencial de García Luna. Muchas preguntas en el aire. Muchas respuestas que estamos esperando.

Lo único cierto es que las cosas han cambiado.

Desde que García Luna fue encontrado culpable en la ciudad de Nueva York, el entorno de Facundo Rosas ya no es el mismo.

Hay tiempos que tardan en llegar, pero siempre llegan.