PULSO POLITICO
Gabriel Sánchez Andraca
Al iniciarse el nuevo año sin la fuerte presión de la pandemia del covid-19, con un nuevo gobierno estatal, con un gobierno federal ya bien asentado aunque siguen los constantes cuestionamientos, generalmente infundados de una oposición sin ideas y sin rumbo, la sociedad poblana y mexicana en general, se siente aliviada y con esperanzas fundadas de un mejor futuro.
Es cierto que el nuevo gobernador Sergio Salomón Céspedes no tiene la experiencia política que generalmente se exige a un gobernador, pero muy pocos la han tenido. En la historia del estado de Puebla, ha habido malos y buenos gobernantes, aun cuando no todos han sido buenos políticos.
Generalmente se toma como carrera política, a personajes formados en la administración pública y eso puede hacerlos buenos administradores, pero no buenos políticos. Buenos políticos han sido el doctor Alfredo Toxqui, el licenciado Guillermo Jiménez Morales, el también abogado Melquiades Morales Flores; el licenciado Mario Marín Torres, aunque muchos no lo consideren así, pero nos consta que todavía se le recuerda con afecto en el interior del estado y un error que se exageró mediáticamente, no puede cambiar las cosas tan fácilmente; el licenciado Manuel Bartlett, que tuvo una larga y brillante carrera administrativa al punto de sonar su nombre en dos ocasiones muy fuerte, para la candidatura a la presidencia de la república, es ahora, en el gobierno que desplazó al PRI, cuando ha alcanzado sus mayores y más trascendentes logros políticos.
El licenciado Mariano Piña Olaya, fue un gobernante muy apreciado en varios sectores y en otros no, pero lo cierto es que tenía características de buen político y de buen administrador. Decía de él el delegado del comité nacional del PRI, don Mario Vargas Saldaña: “Tiene una visión clara de lo que debe hacerse para bien-gobernar a Puebla. El sería el gerente y sus más cercanos colaboradores serían el licenciado Alberto Jiménez Morales, como subgerente de la zona norte del estado y el ingeniero Rodolfo Sánchez Cruz, como subgerente de la zona sur. El resultado hubiera sido formidable”.
“Pero el ingeniero Sánchez Cruz, que se fajó como los buenos en la campaña, no acepto el puesto de delegado para la región sur de la entidad, por considerar que no iba a aceptar un puesto que se consideraba de menor categoría en la escala burocrática”.
Vargas Saldaña lamentaba no haberle explicado la idea que Piña Olaya tenía de las cosas. “Yo debí decirle al ingeniero, que en realidad lo estaba designando como sub-gobernador de la zona sur y a Jiménez Morales Alberto, como sub-gobernador de la zona norte, como se hace en las grandes empresas yanquis. Hubiera sido formidable y con estupendos resultados para Puebla”.
El mismo ingeniero Sánchez Cruz, dijo en plática de café con este columnista: “No entendí en ese momento la jugada, me enojé, pues había trabajado bien en la campaña y me retiré”. Así es la política.
A NIVEL NACIONAL, EL GOBIERNO DE LÓPEZ-OBRADOR, ha logrado asentarse bien como gobierno nacional. Las intrigas politiqueras, los ataques de una oposición pesimamente integrada, sin propuestas, sin ideas, defendiendo solo lo indefendible: su desempeño al frente de los destinos de la nación.
La cercanía con el pueblo, la explicación diaria de lo que hace y de lo que no hace, sus referencias históricas, todo eso y más, ha logrado que tenga una aceptación, como ningún gobernante de la era moderna de México ha tenido.
El nuevo gobernador de Puebla dejó una buena imagen como presidente municipal de Tepeaca, según afirman los tepeaquenses que hemos entrevistado y eso mismo puede lograr como gobernador, si actúa como político y no como administrador. Eso es sumamente importante.
Así las cosas, este año puede ser mucho mejor que los tres años pasados, mismos en los que perdieron la vida por el covid y por muchas otras causas, tantos amigos y conocidos, años de pandemia que derivaron en crisis económica y social y que por fortuna están siendo superados. No hay que perder la fe en un futuro mejor y hay que luchar por eso. Feliz y próspero año nuevo a todos nuestros lectores. Hay la intención de volver pronto a nuestra edición impresa.