Jorge Marcelino Alejo
Cuatro camiones repletos de cerveza de conocida marca, el pasado día 10 fueron interceptados por un grupo armado en la zona de Tehuacán cuando se dirigían a Tlacotepec de Díaz. Más tarde los conductores fueron encontrados amarrados y abandonados en la zona de El Tepeyac, en el municipio de Eloxochitlán en la Sierra Negra.
El suceso sin embargo, es parte de la cotidianidad que ocurre en las carreteras del país, incluyendo la autopista que atraviesa a la entidad poblana y que va de México a Veracruz. A los empresarios les han robado trailers cargados de mercancía, alimentos, abarrotes, materias primas e incluso les despojan de sus unidades.
Los asaltos alcanzan cifras preocupantes.
La Confederación de Cámaras Industriales y la Cámara del Autotransporte de Carga, estiman que a la industria le cuesta más 92 mil millones de pesos anuales el robo en carreteras. En los primeros siete meses del año –de enero a julio- se cometieron cuatro mil 961 robos al transporte, de los cuales el 87 % fueron con violencia.
Con este panorama, si la Guardia Nacional acaba con el robo en carreteras, los empresarios serían los primeros en aplaudirle. Y no solo eso, tendrían razón más que suficiente para apoyarla a continuar combatiendo a la delincuencia en varios delitos, que traen por la calle de la amargura a la sociedad y a la planta productiva.
Acabar con los asaltos a camiones cargados de mercancía y materias primas, en momentos en que la mercancía robada aparece en mercados populares para su “comercialización”, sería la carta de presentación de la Guardia Nacional, para incorporarse a la Secretaría de la Defensa Nacional, como pretende la propuesta del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Terminar con el robo en carreteras, entonces, sería un importante avance para extinguir la delincuencia que se apoderó de las carreteras, donde todos los días tanto el robo como la violencia flagelan al transporte carretero, que además, tiende a empeorar porque no se ve una estrategia frontal a la delincuencia en carreteras.
Si la Guardia Nacional muestra arrojo y audacia para acabar con el robo en carreteras, confirmará que si las puede contra la delincuencia, y se terminaría todo ese lio que arman los legisladores tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, pero además, habría también un importante ahorro de dinero en esa nueva consulta popular, que propone López Obrador para decidir el destino de la Guardia Nacional.
M E M O R A N D U M
RELEVO EMPRESARIAL
Más allá de que sea una mujer la que releve a Ignacio Alarcón en la presidencia del Consejo Coordinador Empresarial de Puebla -en este caso la expresidenta de la Canirac Olga Méndez Juárez- junto con los otros cinco varones aspirantes fogueados en cámaras empresariales, hay que advertir el final de la etapa Barbosista, y reponer tiempos perdidos en resultados que pudieron darse de un trabajo conjunto entre empresarios y Gobierno Estatal.
Porque no es únicamente atraer inversiones generadoras de empleo.
Lo anterior significa que Ignacio Alarcón está obligado a echar mano de todo lo que esté a su alcance, para intentar recuperar la armonía entre Gobierno y Capital. El propósito es evitar que se ahonde el distanciamiento existente entre ambos sectores, pues todavía le faltan dos años al Barbosismo. De ganarse tiempo, el relevo podrá trabajar en mejores condiciones, pues no batallaría con lo que Ignacio Alarcón tiene ahora una mejor perspectiva.
Eso de dejar hacer no les deja nada bueno a los empresarios.
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