Francisco Javier Estrada. Eres el amor

 

FRANCISCO JAVIER ESTRADA nació en Toluca, México. Es Presidente de Casas del Poeta AC. Fue director y fundador de revistas En tierra mexiquense; creador del Encuentro Nacional de Poetas del Estado de México, y fundador de la editorial Casas del Poeta. Ha escrito más de 4 mil artículos para revistas y periódicos en la entidad. Tiene más de 120 títulos publicados en ensayo, cuento, poesía y antologías. Acá presentamos una breve muestra de su poesía.

 

Eres el amor

 

¿Acaso eres una rosa prendida al ojal

de un traje de ciego enamorado?…

o vuelo alegre, coqueto de quien

se siente dueña del arenal cristalizado;

—invidente— ya agonizante, vive anhelando

escuchar su voz de niña y matrona

que domina lo mismo caída del agua,

que besos del aullador; en ella su alma

desobediente es parte de su espejo:

especie de Cupido y demonio

que respira por silueta los ardores

de aguerrida juventud, se quema

entre eucaliptos y álamos.

 

No sabe a dónde girar su cuello de jirafa

o venado espantado ante rostro de medusa,

escapar de prisión que pinta en óleo oro

y plata de medievales artistas: dibujos de

geranios de tierra o de rosas llenas de espinas

y colores; ardor que quema piel y le hace

sangrar como a Cristo en el Calvario.

 

 

Eres el amor, amoroso no entiende de ello,

pero siente a diario cómo es que su alma

en penuria camina veredas entre piedras

y abrojos.

Ante sonrisa del amanecer, prendido

de perlas, blancos y sensuales dientes

le muerden cual si durazno fuera;

verano de húmedas corrientes marinas

lo tunden entre remolinos de hoguera

y tormentas del trópico.

Verde manzana al primer mordisco

da un grito: ¡Ay! y se conduele de

haberlo hecho ante el demonio; con

rostro maquillado de carnaval, es

hembra y escultura que ríe cual loca de

atar, por el que domina con imagen

de virgen y mujer de moral distraída.

 

Siente dientes de hechicera, queda

apresado en rojos labios y, sin saberlo,

se hace su razón y esclavo; secuestrado

por la esfinge, es solo marioneta que

abandona campo de guerra, es un ser

más vestido de harapos y desaliento

caminando veredas del mundo y sus

mares en soledad.

 

Eres el amor, sentimiento complejo

que igual hipnotiza en el afecto del beso

enamorado; que en tierras baldías

de pasión hiere sus manos y ensombrece

caricias, que en grietas se desmoronan

por el cuerpo de la que se cree es amante

y sólo es muñeca del destino cruel.