Los pendientes del Congreso de Puebla

Victor de Regil

 

Este año nuevo se esperan interesantes debates dentro del Congreso de Puebla, se trata de temas muy candentes que, invariablemente, tendrán que abordar nuestros diputados locales. Uno de ellos, sin duda, es la despenalización del aborto, tema que todos los partidos políticos en Puebla, todos, suelen evitar.

Y es que el debate sobre la votación en el Congreso local de la iniciativa que, finalmente, despenalizaría el aborto en el estado de Puebla, tuvo ya su primer lance arriesgado, contundente y hasta incendiario, sorpresivamente, desde la mismísima Iglesia Católica quien se había mantenido cautelosa.

El tema surgió en la primera misa de 2022, donde el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa lanzó, desde la mismísima Catedral, una severa advertencia y crítica por adelantado a los diputados locales.

“Sigue habiendo Herodes en nuestro mundo, sigue habiendo gente, por ejemplo, que legisla en contra de la vida, que promueve leyes que privan de la vida a sus hermanos”, dijo desde el púlpito.

La aseveración de Monseñor no es menor.

Para muchos resultó una declaración muy agresiva, para bien o para mal, y tiene como destinatarios, sin duda alguna, a los 41 integrantes de la LXI Legislatura, quienes inevitablemente tendrá que abordar en las próximas semanas o meses este asunto que es una papa caliente que nadie quiere agarrar.

El tema de la despenalización, que no legalización -los términos importan mucho-, ha sido un pendiente legislativo en Puebla desde los tiempos de Mario Marín Torres. Es un tema complicadísimo, principalmente porque la sociedad poblana, de acuerdo con distintas mediciones, es 70 por ciento católica.

El aborto es un pecado capital, para esta religión. Las reformas sobre el caso han sido combatidas desde el púlpito y desde sus relaciones políticas, por los jerarcas católicos. En todo México y, evidentemente, Puebla no es la excepción.

Las iniciativas que permitirán que el aborto sea legal, si se practica durante las primeras 12 semanas de gestación están en la congeladora legislativa. Llevan ahí más de seis meses. Incluso son de la anterior legislatura.

Ni siquiera Morena, que se supone es un partido de izquierda progresista que apoya estas causas, se atreve a tomar este tema, saben que las repercusiones políticas serían muy grandes y prefieren hacerse de la vista gorda.

Se refieren a reformas al Código Penal y a la Ley de Salud estatales y se encuentran, desde el 16 de junio, en la Comisión de Procuración y Administración de Justicia del Congreso de Puebla. Fueron presentadas, luego del Parlamento Abierto que se realizó.

A pesar de las constantes protestas, algunas incluso violentas, por grupos liderados por mujeres, quienes exigen que se avale la despenalización del aborto, los diputados del anterior ejercicio rehuyeron el tema.

Algunos de ellos, por cierto, repitieron en sus curules. El asunto tendrá que abordarse inevitablemente.

Será en el próximo periodo ordinario, el cual irá del 15 de enero y al 15 de marzo de 2022. De ahí que sean tan significativa y dura la condena del arzobispo.

La comparación de los legisladores con Herodes.

Sí, con ese rey hebreo que el Nuevo Testamento cristiano señala como el gobernante de Judea que ordenó la matanza de los inocentes.

De los niños.

Sin duda se trata de un tema muy complejo en el cual se requiere un amplio y profundo debate, en donde todas las voces deben de ser escuchadas. Aún así, se trata de un tema del cual difícilmente podemos podernos de acuerdo.