Gabriel Sánchez Andraca
Todo mundo sabe que la justicia laboral en Puebla camina con pasos de tortuga.
Lo anterior se puso de manifestó durante el gobierno del panista Rafael Moreno Valle Rosas, tiempo en el que se despedía sin miramientos y sin cumplir con las mínimas normas de justicia laboral, a miles de trabajadores (y trabajadoras) del propio gobierno del estado, pues en las mismas dependencias gubernamentales se propiciaba el retardo de los asuntos o el rechazo de las autoridades del ramo, para darles entrada.
Más de diez mil trabajadores del gobierno del estado, sufrieron injusticias que se cometieron incluso con personas con diez, quince y hasta veinte años de servicios. Hubo por lo menos dos suicidios y varios infartos, de trabajadores y trabajadoras que de la noche a la mañana y luego de haber laborado durante años en el sector público, se pronto se encontraban sin trabajo y con compromisos familiares que cumplir.
El rezago de casos que deberían atender las autoridades laborales, era enorme. En la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, atendida por un abogado familiar de la fallecida esposa del líder cetemista, también fallecido, Blás Chumacero, escondía expedientes para obligar a los abogados (y abogadas) defensores, a llegar a acuerdos con él en lo oscurito. Ya en este gobernó, el funcionario fue denunciado por una abogada agraviada y no solo se le destituyó, sino que fue enviado a la cárcel.
El rezago había llegado a más de 30 mil asuntos. Los burócratas despedidos, muchos de los cuales no quisieron presentar demanda, tuvieron que esperar que terminara el gobierno del propio Moreno Valle Rosas, el de Antonio Gali, el de Pacheco Pulido, y no veían solución a su problema en el corto tiempo.
Vino la elección de nuevo gobernador y resultó ganador Miguel Barbosa Huerta y hasta entonces empezaron a resolverse algunos de esos problemas, pero todavía muchos ex empleados del gobierno estatal, están esperando la solución de sus casos.
Cuando se eligió a la señora Martha Erika Alonso, esposa del gobernador panista, muchos pensaron que sus causas ya estaban perdidas.Vino lo del accidente en el que fallecieron los dos, don Rafael y doña Erika, y ahora las cosas empiezan a cambiar.
AYER FUE PUESTO EN MARCHA POR EL GOBERNADOR Barbosa Huerta, el nuevo modelo de justicia laboral: es un modelo moderno, según se dijo, que está basado en el sindicalismo, la justicia laboral que incluye la creación de tribunales laborales y el Centro de Conciliación.
Se privilegiará el acuerdo entre las partes y si esto se logra, los casos tendrán solución en un máximo de 15 días, y no de quince años como ahora ocurre. Esto ayudará enormemente a reducir los rezagos.
Las autoridades encargadas de la justicia laboral en Puebla, contarán con abogados (y abogadas) especialistas y preparados para trabajar dentro de las normas del nuevo sistema que pretende fortalecer el acceso a este tipo de justicia, tanto a trabajadores como a empleadores, así como evitar los abusos de abogados defensores, que perjudiquen a los trabajadores.
El Tribunal Superior de Justicia, vigilará para que no haya corrupción y que los objetivos del nuevo sistema, sean alcanzados.
Se hizo un llamado a los abogados a evitar las prácticas que obstaculizan el acceso a la justicia, así como en buscar la solución de los conflictos en el menor tiempo posible.
El titular de la Secretaría del Trabajo de Puebla, licenciado Abelardo Cuellar Delgado, dijo que se inicia una nueva era en esta materia, elogiando que el gobernador Barbosa Huerta, haya persistido en este tema pese a la pandemia del covit-19 que tanto daño ha causado al mundo.
En el acto estuvieron presentes, los funcionarios de la Secretaría del Trabajo y del Tribunal Superior de Justicia en el estado, los diputados del Congreso local y todos los jueces, (hombres y mujeres) así como altos funcionarios de la Secretaría del Trabajo federal.
EL DIRIGENTE NACIONAL DEL PAN, MARKO CORTES, pretendió responder la afirmación hecha por el senador panista Gustavo Madero, en el sentido de que si el PAN no hace algo importante y distinto a lo que está haciendo, estará perdido en las elecciones del 2022, pero no tuvo que ir a Roma por la respuesta, como dice el dicho.
El senador Madero, dijo que es necesario limpiar a la política, especialmente de su partido, de tanta mediocridad.
Pero la mediocridad no solo está en el PAN, todos los partidos, en especial los tradicionales: PRI, PAN, PRD e incluso Morena, tienen directivas muy por abajo del nivel que en estos momentos necesitan. Hay que platicar brevemente con militantes de los cuatro partidos mexicanos más conocidos, para conocer su decepción, sus desacuerdos y su rechazo a la forma en que esos dirigentes actúan.