245 mexicanos fallecidos en EUA, regresan a México

P U L S O    P O L T I C O

Gabriel Sánchez Andraca

 

              Las urnas conteniendo las cenizas de 245 mexicanos, fallecidos en Nueva York por coranovirus, fueron regresadas a México el sábado, en un vuelo especial de la Fuerza Aérea Mexicana y entregados a sus familiares por el cónsul de México en la urbe estadounidense.

             De esos 245 mexicanos que regresaron a su patria, 104 eran poblanos, principalmente de la región mixteca; de Tlaxcala, solo fueron 18, del Estado de México 31, de Oaxaca 17 y de Veracruz 6.

            La comunidad de poblanos en Nueva York, es la más grande que existe en esa ciudad y ya casi se le acerca la comunidad poblana de Los Angeles, California, seguida de la de Chicago.

            Esto demuestra la urgencia de que los gobiernos federal y estatal, implementen políticas de desarrollo económico para la región sur de la entidad, pues de ahí sale el mayor número de emigrantes hacia la frontera norte en busca de un mejor nivel de vida para ellos y sus familias.

            Si como se ha venido diciendo, el objetivo del actual gobierno es frenar la emigración por necesidad, lograr que en sus pueblos la gente encuentre un modo digno de vivir, se tienen que cambiar las políticas económicas regionales, para evitar que siga existiendo la desigualdad social, la pobreza, por falta de oportunidades de trabajo.

            Los ayuntamientos deben colaborar en esta lucha, promoviendo las actividades económicas locales mediante apoyos a la creación de pequeñas y medianas granjas para la producción de alimentos, huertos familiares, impulsar las artesanías locales, el pequeño comercio, todo lo que sea posible.

            Pero también tienen responsabilidad los partidos políticos que solo trabajan en época electoral, para capacitar a sus militantes que ocupan una posición en los gobiernos municipales y no se concreten a pintar las bancas del zócalo, a perseguir a los vendedores ambulantes como si fueran delincuentes y a arreglar algunos parques públicos y cambiar el alumbrado de algunas calles. Parte de eso está dentro de sus obligaciones, pero también, con tantita imaginación, pueden participar para impulsar el desarrollo económico de sus municipios. Lo que pasa es que a los gobiernos municipales, llega mucha gente sin oficio político, sin sensibilidad social, pues proceden de partidos pésimamente organizados y estructurados y no tienen imaginación para romper con la rutina de lo que hacen cada tres años, los ayuntamientos de los 217 municipios de la entidad, salvo raras excepciones.

            LOS PRIISTAS PARECEN NO HABERSE DADO cuenta de su real situación. En el 2018, perdieron en tal forma, que les va a costar mucho trabajo reponerse. Perdieron gran parte de su militancia, tienen una aguda escasez de líderes capaces y carismáticos, perdieron su ideología liberal, al grado de que ahora, como el PRD, andan buscando una alianza con el PAN, perdieron gran parte de su estructura, ya no cuentan con el apoyo de sus sectores tradicionales (obrero, campesino y popular) no tienen organización y lo peor, ya carecen de la disciplina que fue uno de sus fuertes en el pasado. Y pese a todo eso, insisten en seguir con sus métodos de elección interna autoritarios.

             Por determinación del comité nacional, dijo el delegado priísta en Puebla, se impone como dirigente estatal a Néstor Salgado, un joven ex presidente de Quecholac que al parecer tiene buenas intenciones, pero que no es aceptado por gran parte de la militancia, precisamente porque se trata de una imposición que ya no están dispuestos a tolerar.

            Ya le platicaremos mañana de lo que opinan los priístas que aun quedan, pero le anticipamos que la noticia cayó como cubetazo de agua fría en muchos de los que esperan cambios substanciales en lo que fue el partido más fuerte de México durante décadas, para recobrar gran parte de su presencia en la vida política del país, porque volver totalmente al pasado, es poco menos que  imposible.